Viernes de música con DJ sets en los Arcos del Rosedal

En el corazón de Palermo, bajo los emblemáticos Arcos del Rosedal, se encuentra Francisca del Fuego, un lugar que ha ganado mucho reconocimiento como uno de los espacios más atractivos de la ciudad. Este restaurante, bar y espacio cultural combina de manera impecable tres elementos: cocina artesanal, una ambientación única y ciclos musicales que transforman cada noche en una experiencia especial.

Francisca’s Piano Bar: música entre risas y baile

Desde septiembre, el local ha sumado un nuevo atractivo a su agenda de noche: Francisca’s Piano Bar, un ciclo que se realiza los viernes desde las 22 horas. La idea es comenzar con shows íntimos de piano, guitarra y voz, donde artistas consagrados comparten el escenario con talentos emergentes. Luego, la noche se llena de energía con DJ sets, convirtiendo el salón en una verdadera pista de baile hasta la madrugada. Todo esto bajo la curaduría artística de Piwi Berro Madero, quien mezcla géneros como el indie, rock y folk, finalizando la noche con un toque de electrónica local.

La primera noche de este ciclo fue todo un éxito: Piwi & Facu Iñigo estuvieron acompañados por Andy Chango y San Pulso como sorpresas especiales. En la segunda fecha, DJ Rolling Garros y Capri b2b Mariana Estellat llevaron la vibra a otro nivel, incluso incluyendo piano en vivo después de las 2 de la mañana. Cada viernes se convierte en un motivo perfecto para volver y dejarse sorprender.

Gastronomía que enamora

A la música se le suma una gastronomía igualmente apasionante. La carta de Francisca del Fuego incluye platos para compartir que no te querrás perder, como la fainá clásica y su versión con polpetta y chorizo español. También destacan el hummus de remolacha, la burratina con uvas quemadas y la explosiva salchicha de cordero spicy.

No olvides probar las empanadas caseras, desde las tradicionales de carne hasta opciones innovadoras como las de cordero al Malbec. Y, claro, las protagonistas indiscutidas son las pizzas de masa madre, que ofrecen bordes aireados y cocciones perfectas. Clásicos como la Margherita conviven con creaciones únicas como la de Mortadela con pistachos y pesto ahumado.

Para quienes buscan un almuerzo, hay sándwiches en pan de pizza y hasta milanesa de pollo en panko. Y cada comida se puede cerrar con delicias como tiramisú de pistacho o el clásico flan de dulce de leche casero. La carta de cócteles es también un punto fuerte, con opciones que van desde un refrescante Mandarin Spritz hasta un elegante Bosco Negroni.

Un ambiente único y variado

La ambientación de Francisca juega un papel vital. El salón está decorado con vitrales de colores, lámparas árabes y candelabros que crean un ambiente cálido y festivo. Delante, se levanta una gran carpa marroquí, mientras que el patio trasero tiene un living exclusivo con mesas de madera y una cabina de DJ para musicalizar la noche.

Lo mejor es que Francisca del Fuego abre todos los días, tanto de día como de noche, ofreciendo cocina, cócteles y música en diferentes versiones. Así, cada visita puede ser un evento distinto, desde un almuerzo tranquilo con amigos bajo la carpa árabe, hasta un vibrante viernes de Piano Bar que se extiende hasta altas horas.

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