En el mundo empresarial, el área de Recursos Humanos (RRHH) no debe ser vista simplemente como un soporte; es, de hecho, el corazón que impulsa el funcionamiento efectivo de cualquier organización. Después de años interactuando con empresas y sus equipos, se ha hecho evidente una problemática recurrente: la soledad del área de Recursos Humanos.
Con frecuencia, el equipo de RRHH es pequeño, pero cargado de responsabilidades. Se les exige liderar transformaciones culturales, gestionar el talento y brindar apoyo a los líderes, todo ello sin un presupuesto adecuado, sin tiempo suficiente y, en ocasiones, sin un lugar en la mesa donde se toman decisiones clave.
La Paradoja de los Recursos Humanos
Es una paradoja costosa: deseamos organizaciones con equipos comprometidos, líderes inspiradores y un ambiente saludable; sin embargo, seguimos tratando a RRHH como un área blanda, relegándola a un papel secundario. RRHH no es un extra. Es esencial para construir la cultura organizacional que se necesita para enfrentar los desafíos actuales y futuros.
Una Nueva Forma de Gestionar el Talento
Existen formas innovadoras de gestionar el talento y cuidar a quienes se encargan del bienestar de la empresa. Durante el Networking Day de Gerencias, organizado por Club PYXO, se evidenció que hay empresas que están transformando su enfoque. Compartieron mejores prácticas sin reservas: programas internos de liderazgo, tableros de inteligencia artificial para mapear talentos y talleres de inteligencia emocional. Lo más valioso fue el espíritu de colaboración, donde personas reales compartieron soluciones auténticas.
Este ecosistema ha comprendido que cuidar a la gente no es un gasto, sino una inversión estratégica.
La Pregunta que Todos Deben Hacer
El cambio comienza con una pregunta incómoda para los tomadores de decisiones: ¿Estás dando a tu equipo de RRHH el reconocimiento que merece? ¿O te encuentras tan absorbido por los problemas del día a día que no ves que sin una gestión sólida de las personas, todo lo demás puede desmoronarse?
Algunos líderes todavía creen que su ventaja competitiva se basa en la maquinaria y la logística. Y eso está bien, pero a medida que el talento se va por la puerta de atrás porque nadie lo escuchó a tiempo, la situación cambia. Todos los días se vuelve más evidente: el talento no se retiene, se enamora. Si no entiendes esto, seguirás contratando para cubrir vacíos en lugar de construir un futuro sólido.
El cambio ya ha comenzado. Tú decides si lo observas desde afuera o si te unes a aquellos que ya han comprendido hacia dónde se dirige el camino.
(*) Consultor especializado en Pymes, Co-fundador y CEO de Club PYXO.
