La cantante Anitta se ha consolidado como una de las principales referentes del funk carioca, un estilo musical que ha ganado popularidad en todo el mundo. Nacida en Río de Janeiro, Anitta ha sabido mezclar ritmos brasileños con influencias globales, llevando su música a listas de éxitos internacionales. Su hogar, enclavado en las montañas de su ciudad natal, refleja su trayectoria y amor por sus raíces.
Nacida el 30 de marzo de 1993 como Larissa de Macedo Machado, Anitta ha logrado fusionar diversos géneros musicales, convirtiéndose en una figura influyente en la música latina y brasileña. La cantante destaca que su vivienda debía ser un reflejo de su identidad: la vivienda tenía que ser brasileira, contar la historia de quién soy, mis raíces, mi religión, menciona en una entrevista con Architectural Digest.
Diseño y Estilo de Vida en su Mansión
La mansión de Anitta, diseñada en colaboración con la firma Studio Ro+Ca, se levanta en un entorno que combina la belleza natural de Río de Janeiro con elementos de su vida y cultura. La propiedad, distribuida en dos pisos, incluye espacios como vestíbulo, cocina, comedor, sala de estar, y múltiples balcones que ofrecen vistas espectaculares.
La artista es una gran amante del arte, y su hogar se asemeja a un museo, exhibiendo obras que reflejan las causas que defiende y sus creencias. Desde la entrada, los visitantes son recibidos por un mural de mosaicos en colores vivos que simboliza a los niños de las favelas, conectando su historia con sus orígenes.
Elementos Culturales y Espirituales
Anitta ha incorporado elementos de su cultura y espiritualidad en el diseño de su hogar. Su habitación fue creada para transmitir una energía zen, mientras que otros espacios incluyen piezas artesanales que representan su conexión con la religión yoruba. Esta tradición africana influye en muchas comunidades afrodescendientes y se enfoca en la armonía entre los seres humanos y las fuerzas espirituales.
El comedor de su mansión cuenta con una lámpara que simboliza un orisha, una deidad que actúa como intermediario entre los seres humanos y el Dios Supremo, lo que añade un significado profundo a los momentos compartidos en familia y amigos.
Un Jardín Inspirador y un Estilo de Vida Único
El jardín de la propiedad, adornado con vegetación típica de Río, da paso a una piscina que Anitta decidió hacer más pequeña, manteniendo un estilo tradicional. El salón trasero destaca por su arte indígena brasileño y un mobiliario que refleja un estilo natural y acogedor.
En resumen, la casa de Anitta no solo es un espacio de lujo, sino también un reflejo de su identidad cultural y artística. Su diseño y decoración cuentan historias de su vida, sus raíces y su compromiso con las causas que defiende, convirtiéndola en un hogar verdaderamente único.
