El Secreto de la Sal sobre las Brasas
Incorporar sal a las brasas es un truco común entre los parrilleros experimentados. En la cultura argentina, el asado no es solo una comida; es un evento lleno de tradición y significado. Una de las costumbres más útiles y sencillas que practican los asadores es arrojar sal sobre las brasas.
Aunque la sal gruesa o entrefina es conocida como un condimento esencial para sazonar la carne, su aplicación directa sobre el fuego puede ofrecer beneficios que van más allá del simple sabor. A continuación, exploraremos algunas funciones clave de la sal en la parrilla.

Funciones Ocultas de la Sal en la Parrilla
Por lo general, se piensa en la sal como un aderezo para la carne, pero este ingrediente puede actuar sobre el carbón encendido, mejorando el proceso de cocción del asado.
1. Control del Humo Excesivo
Cuando la grasa de la carne gotea sobre las brasas, se produce un humo espeso que puede dar un sabor amargo a la carne. Al caer sal sobre el carbón, absorbe parte de la grasa y evita que se queme en exceso, reduciendo así la cantidad de humo generado.
2. Estabilización de la Temperatura
Un calor constante es crucial para una cocción pareja. Al esparcir sal gruesa sobre las brasas, se prolonga su duración y se logra una temperatura más uniforme. Esto ayuda a que las piezas de carne se cocinen de manera equilibrada, evitando zonas crudas o quemadas.
3. Reducción de las Pequeñas Llamaradas
Además de mejorar el sabor y estabilizar el calor, la sal puede ayudar a controlar pequeñas llamas que surgen cuando la grasa cae directamente sobre el fuego. Al cubrir parte del carbón, disminuye el oxígeno disponible y reduce la intensidad de las llamas, sin apagar completamente las brasas.
Precauciones y Usos Adicionales
En la cocina, la sal también se utiliza para apagar pequeños incendios causados por aceite caliente, ya que absorbe el líquido y corta la combustión. Sin embargo, no debe sustituir a un extintor, ya que no es efectiva contra incendios de gran magnitud y puede generar vapores peligrosos si se arroja sobre fuegos químicos o eléctricos.
En la parrilla, su uso es seguro siempre que se limite a controlar el humo y las llamas leves, mejorando así tanto la calidad de la cocción como la experiencia de los comensales.
Con estos consejos, el uso de sal en la parrilla puede transformar tu experiencia de asado, asegurando no solo un sabor delicioso, sino también una cocción más efectiva. ¡Anímate a probarlo en tu próxima parrillada y disfruta de todos sus beneficios!