Cada 3 de junio, se celebra el Día del Sommelier, una ocasión perfecta para explorar el fascinante mundo del vino y sus maridajes. En Buenos Aires, los sommeliers comparten sus selecciones favoritas, que no solo destacan la diversidad de etiquetas, sino que también transforman cada comida en una experiencia sensorial única.
Este día es ideal para descubrir los secretos de cinco cavas notables en la ciudad, donde la pasión y el conocimiento se fusionan para ofrecer una experiencia enológica excepcional. Cada espacio cuenta con la curaduría de expertos que seleccionan cuidadosamente los vinos para complementar los sabores de su gastronomía.
1. Casa Cavia
Ubicado en Palermo, Casa Cavia destaca por su impresionante cava que alberga más de 300 etiquetas de vinos nacionales e importados. Dirigida por Delvis Huck, una sommelier con una trayectoria destacada, esta cava se enfoca en la fineza y el envejecimiento adecuado de cada etiqueta.
La selección incluye el Cavalleri Blanc de Blancs, un exquisito vino italiano que combina elegancia y frescura, ideal para acompañar platos como los langostinos curados con yema cremosa.
2. Puraltura
En Puraltura, la experiencia del vino se presenta de manera accesible y didáctica. Su cava cuenta con más de 80 etiquetas argentinas, seleccionadas por Alejandro Mesa Rubio, un sommelier que busca democratizar el mundo del vino.
Los vinos se presentan de menor a mayor intensidad, comenzando con un Blanco de Blancas de Sarapura, perfecto para acompañar una tabla de quesos, y culminando en un Cactus Tannat de Altura, que se marida maravillosamente con platos intensos como el bife de chorizo.
3. Mago
La propuesta de Mago no se limita a sus cortes a la leña; su cava, curada por Marcela Rienzo, incluye una variedad de etiquetas de las 18 provincias productoras de Argentina. Esta diversidad garantiza que cada vino cuente una historia única.
Entre sus joyas se encuentra el Tanat de Los Aromitos, que complementa a la perfección los sabores intensos de la parrilla. La experiencia se centra en resaltar la conexión entre el vino y la gastronomía argentina.
4. Mishiguene
En el corazón de Palermo, Mishiguene combina alta cocina judía con una cava de aproximadamente 180 etiquetas. La sommelier Paula Scapuccio se enfoca en seleccionar vinos de pequeños y medianos productores que reflejan la diversidad del país.
Para platos como el pastrón, recomienda maridar con un Pinot Noir, mientras que los cortes braseados se disfrutan mejor con Malbecs de altura, demostrando que el maridaje es un arte que transforma cada comida.
5. Enero
Frente al río, Enero ofrece una experiencia gastronómica única con una cava curada por Andrea Benedetti. Su selección incluye vinos de diversas regiones, desde Mendoza hasta Río Negro, cada uno representando la riqueza del suelo argentino.
La carta está diseñada para maridar con una cocina ítalo-argentina, donde los vinos frescos y minerales acompañan perfectamente los platos de pasta y carne, creando un equilibrio entre sabores auténticos.
Celebrar el Día del Sommelier es una invitación a reconocer el arte del vino y su capacidad para transformar cualquier ocasión. Estas cinco cavas en Buenos Aires no solo ofrecen una selección de vinos excepcionales, sino que también brindan la oportunidad de disfrutar de una experiencia gastronómica inolvidable. ¡Anímate a explorar y descubrir tu próxima etiqueta favorita!
