Cómo hacerlo con solo dos ingredientes, rápido y sencillo
El yogur griego ha tomado protagonismo en muchas dietas saludables gracias a su textura espesa y cremosa, que lo hace ideal para combinar con frutas o cereales. Esta variedad ofrece un mayor contenido de nutrientes, lo que la convierte en una opción atractiva para quienes buscan cuidar su alimentación. Si te interesa, hacer yogur griego casero puede ser una opción divertida y sencilla.
Este tipo de yogur se obtiene al filtrar el yogur tradicional, eliminando la mayor parte del suero. El resultado es un producto más denso, con un sabor levemente ácido. Para prepararlo en casa, solo necesitas un buen yogur natural y una tela o filtro para separar el suero.
Además de ser saludable, el yogur griego casero te permite jugar con los sabores. Podés endulzarlo con miel, agregarle frutos secos o usarlo como base para varios dips. Las posibilidades son muchas y se adaptan a tus gustos.
Paso a paso: cómo hacer yogur griego en casa
Hacer tu propio yogur griego es más fácil de lo que parece y no hace falta ser un experto en la cocina. Con solo dos ingredientes y unos minutos, podés conseguir un yogur perfecto para tus desayunos o snacks saludables.
Los ingredientes que necesitas son un litro de leche entera (fresca o pasteurizada) y dos cucharadas de yogur natural. Aquí te dejo los pasos:
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Calentar la leche: Vierte la leche en una olla y caliéntala hasta que llegue a unos 85 °C (sin hervir). Esto ayuda a modificar las proteínas, logrando una textura más cremosa.
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Dejar enfriar: Esperá a que la leche baje a unos 45 °C, que debe sentirse tibia al tacto.
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Agregar el yogur base: Mezclá las dos cucharadas de yogur natural con un poco de leche tibia en un recipiente y luego incorporá esta mezcla a la olla con el resto de la leche.
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Dejar fermentar: Cubrí el recipiente y mantenelo en un lugar cálido, como dentro del horno apagado con la luz encendida, durante 6 a 8 horas. Cuanto más tiempo repose, más espeso y ácido se pondrá.
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Colar el yogur: Cuando esté listo, volcá la mezcla en un colador cubierto con una gasa o filtro de tela y dejá escurrir en la heladera durante 1 a 2 horas. Esto eliminará el suero y le dará la consistencia espesa.
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Guardar y disfrutar: Conservá el yogur griego en un frasco hermético en la heladera por hasta 5 días.
Esta receta es una manera accesible y divertida de disfrutar de un producto delicioso y nutritivo en casa. ¡Animate a probarlo!