La Casa Blanca de Habana no es solo una pizzería; es un verdadero homenaje a la historia, la familia y la amistad que florece en el corazón de Villa Pueyrredón. Este emblemático local, reabierto por dos amigos de toda la vida, se convierte en un punto de encuentro para quienes valoran la buena comida y la calidez del barrio.
Desde su reinauguración en septiembre de 2024, La Casa Blanca ha sabido combinar elementos nostálgicos con un enfoque moderno y artesanal. En un entorno donde los recuerdos cobran vida, la pizzería ofrece una experiencia gastronómica que va más allá de la simple alimentación, creando lazos y recuerdos que perduran en el tiempo.
Un Diseño que Respira Historia y Modernidad
Al cruzar la puerta, los visitantes son recibidos por un diseño que mezcla materiales nobles y detalles contemporáneos. El salón conserva íconos del antiguo local, como el cartel original y las pizzeras que ahora decoran el espacio, mientras que la luminosidad y el uso de cerámicas ilustradas aportan un aire fresco. Este ambiente acogedor es perfecto para disfrutar de una buena pizza, ya sea en el interior o en la vereda, donde la atención es siempre cercana y relajada.
Una Propuesta Gastronómica Artesanal
El corazón de La Casa Blanca late con fuerza en su cocina, visible desde el salón. Aquí, un horno de piedra 100% a leña es el protagonista, donde las pizzas son cocinadas al momento. Con una masa de fermentación lenta de 48 horas y alioli casero, cada bocado es una explosión de sabor. El chef Alejo Medina lidera un equipo comprometido, asegurando que cada receta se prepare con la máxima atención al detalle.
Opciones para Todos los Gustos
- Entrantes: Para compartir, la carta incluye pan de pizza con alioli, porciones de fainá con toppings creativos y el lehmeyún de la casa, una receta familiar que honra la cocina armenia.
- Pizzas de 30 cm: Ofrecen combinaciones tradicionales y especiales, fusionando técnicas napoletanas con sabores porteños.
- Opciones dietéticas: Las versiones veganas y sin TACC están disponibles, siempre priorizando la frescura y la trazabilidad de los ingredientes.
Entre las especialidades, se encuentran la napolitana, la fugazzeta rellena y la pizza azul con cebollas caramelizadas. Cada una refleja un equilibrio perfecto entre tradición y creatividad.
Postres que Dejan Huella
El capítulo dulce no se queda atrás. La torta de ricota de la nona Elena y el budín de pan con masa madre son verdaderas delicias que invitan a disfrutar de un cierre perfecto. Para acompañar, la carta ofrece bebidas que van desde cervezas y vinos hasta cócteles clásicos, con un toque especial: el moscato joven Momenti, que se sirve solo o en versiones refrescantes como el Moscatoni.
La Casa Blanca: Un Proyecto con Corazón
La Casa Blanca de Habana no es solo un lugar para comer; es un proyecto afectivo, cultural y gastronómico que celebra la esencia del barrio. Con un enfoque en lo artesanal y un profundo respeto por la tradición, este establecimiento demuestra que los clásicos, cuando se hacen con pasión, nunca pasan de moda.
Dirección: Nazca 4301, Villa Pueyrredón.
Si buscas un lugar donde disfrutar de una buena pizza y vivir una experiencia única, no dudes en visitar La Casa Blanca de Habana. ¡Te invitamos a explorar este rincón especial y compartir momentos inolvidables con amigos y familia!
