Volatilidad de Tasas y Apretón Monetario: Los Bancos Frenan el Crédito
En un contexto de alta volatilidad, los bancos están enfrentando días frenéticos. Este miércoles, el Ministerio de Economía llevará a cabo una de las licitaciones de deuda más esperadas, lo que ha generado gran expectativa en el mercado. La atención está centrada en las tasas que el Tesoro validará, especialmente después de que la tasa nominal anual (TNA) de las Lecaps alcanzara el 75% y la caución a un día rozara el 80% TNA intradiario. Los bancos, anticipando un escenario de incertidumbre hasta después de las elecciones legislativas, están limitando su capacidad de otorgar créditos.
En las últimas colocaciones, el Tesoro convalidó un aumento significativo en las tasas para gestionar la liquidez suelta tras el desarme de las Letras Fiscales de Liquidez (Lefis). Esta medida busca evitar una mayor presión sobre el precio del dólar. Sin embargo, el incremento en los rendimientos ha llevado al Gobierno a actuar con mayor cautela en la próxima licitación, reflejando la tensión entre los bancos y el Banco Central en la búsqueda de soluciones a la liquidez del sistema.

Medidas del Banco Central y su Impacto
Previo a esta licitación, se reveló que el BCRA abriría una ventanilla de liquidez para los bancos a través de la oferta de pases activos contra Letras de más de 60 días de plazo. Esta acción busca poner un límite a las tasas. Aunque el BCRA no hizo comentarios, la noticia fue digerida por los bancos durante el día anterior.
La ventanilla de liquidez permitirá a las entidades acceder a fondos mediante pases activos, presentando Letras del Tesoro adquiridas en licitaciones primarias como garantía. Este esquema funcionaría con la tasa TAMAR más un spread, con el objetivo de inyectar liquidez al sistema y facilitar un mayor rollover de la deuda. Sin embargo, desde Delphos Investment advierten que, aunque esto permitirá a los bancos sortear episodios de falta de liquidez, lo hará a un costo elevado.
El Crédito se Congela
El cambio en la política económica y el control de los agregados monetarios han generado volatilidad en las tasas de interés, encareciendo tanto las tasas que el Tesoro debe pagar como las tasas activas de los bancos. Desde mediados de julio, el otorgamiento de créditos ha disminuido, y muchas empresas han optado por frenar sus decisiones de financiamiento, según confirmaron varios bancos de primera línea.
- En julio, los préstamos en pesos al sector privado crecieron un 3,7% mensual real, pero este crecimiento fue inferior al de 2024, que alcanzó un 10% en agosto.
- Se observa un aumento en la mora de los préstamos personales y tarjetas de crédito, junto con un incremento en las tasas activas reales.
- La actividad económica ha retrocedido a niveles de febrero.
Para el tercer trimestre, los bancos anticipan una liquidez más cuidada. El crédito en pesos crecerá a un ritmo más moderado que al inicio del año. En el sector empresarial, seremos más selectivos por sector y garantías, señalaron. La reactivación del crédito podría no ocurrir hasta que se despeje la incertidumbre provocada por las elecciones legislativas.
Este panorama también afecta a quienes invierten en acciones de bancos que cotizan en la bolsa. Aunque existen oportunidades, el contexto macroeconómico podría presionar los balances corporativos y moderar el crecimiento durante el resto del año.
La situación actual no solo pone de manifiesto la complejidad del sistema financiero, sino que también plantea preguntas sobre cómo los bancos se adaptarán a estos desafíos en el futuro. ¿Qué estrategias implementarán para navegar en un entorno de tasas fluctuantes y alta incertidumbre económica?