Una conocida cadena de café cerró 400 locales: impacto en Argentina
La cadena de cafeterías Starbucks anunció que cerrará 400 sucursales en Estados Unidos y Canadá. Esta decisión es parte de un plan de reestructuración que busca corregir una caída sostenida en sus ventas durante seis trimestres consecutivos. Además, la empresa planea despedir a 900 empleados administrativos y destinar 1.000 millones de dólares para reorganizar sus operaciones.
Los cierres impactan especialmente a zonas con alta concentración de sucursales, como Nueva York, donde se bajarán las persianas en 54 locales, incluyendo lugares emblemáticos como Upper East Side y Greenwich Village. Este ajuste refleja cambios en los hábitos de consumo, ya que muchos clientes están optando por cafeterías independientes, cadenas más pequeñas o formatos de drive-thru que ofrecen mejor velocidad y precios más accesibles.
Crisis en Starbucks: bajaron las ventas
La baja en las ventas en Starbucks se relaciona con varios factores. La inflación y el aumento en el costo del café han afectado el poder adquisitivo de los consumidores. Una encuesta reveló que más del 70% de los clientes planea reducir sus visitas a la cadena por los incrementos de precio, especialmente entre aquellos que ganan menos de 100.000 dólares al año.
El nuevo CEO, Brian Niccol, ha observado que muchos locales no están cumpliendo con las expectativas de rentabilidad. También se nota un cambio en la dinámica de las ciudades tras la pandemia. Con menos movimiento en oficinas y un mayor interés por los pedidos móviles, algunos locales están teniendo dificultades económicas.
Además, el sindicato Starbucks United ha denunciado que varios de estos locales son aquellos donde los empleados impulsaron procesos de sindicalización, añadiendo un componente de conflicto laboral a esta estrategia de cierre.
La estrategia de la cadena para revertir la crisis
A pesar de estos desafíos, Starbucks no planea retirarse del mercado. La compañía mantiene más de 32.000 locales en todo el mundo y ha anunciado que abrirá nuevos puntos de venta en algunos mercados. En Argentina, la operación seguirá sin cambios y no hay previsión de cierres.
La estrategia del nuevo CEO se enfoca en mejorar la experiencia del cliente en las tiendas. El concepto de “tercer lugar”, un espacio que combina la comodidad del hogar y el entorno de trabajo, será esencial. Se han iniciado remodelaciones en 1.000 sucursales en EE. UU., incluyendo la incorporación de sillones, mesas y enchufes para atraer a quienes buscan un espacio para trabajar o relajarse.
Además, Starbucks ha decidido reducir en un 30% su menú de comidas y bebidas, eliminar la política de baños abiertos y reconectar con detalles tradicionales, como los dibujos a mano que los baristas hacen en los vasos.
Los analistas sugieren que los resultados de estas modificaciones podrían empezar a verse a partir de 2026. Mientras tanto, la cadena enfrenta un entorno complicado: una clientela más exigente, costos crecientes y competidores ávidos por captar a los consumidores que Starbucks está perdiendo.