Trump promete publicar resultados de sus estudios de salud
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha salido a responder a las dudas sobre su estado de salud. Recientemente, anunció que va a hacer públicos los resultados de una resonancia magnética que se realizó en octubre. Curiosamente, afirmó no tener idea de qué parte de su cuerpo fue examinada, lo que ha despertado una ola de comentarios y especulaciones en el ámbito político.
Durante un regreso a Washington desde Florida, Trump se dirigió a los periodistas y dijo: “Si quieren que publique los resultados, lo haré.” Esto ocurrió poco después de que el gobernador de Minnesota, Tim Walz, cuestionara la capacidad mental de Trump y sugiriera que su salud está deteriorada.
A sus 79 años, Trump insistió en que los resultados fueron “perfectos” y negó que la resonancia haya sido para examinar su cabeza. “No tengo ni idea, solo fue una resonancia magnética. No fue el cerebro, porque hice un test cognitivo y lo aprobé con nota. Tuve una nota perfecta que tú serías incapaz de tener”, aseguró a un reportero a bordo del Air Force One.
Un cuadro médico rodeado de opacidad
Karoline Leavitt, secretaria de Prensa, explicó que el presidente se sometió a “imágenes avanzadas” en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed como parte de un control rutinario. Según ella, estos estudios mostraron que Trump tiene una salud física excepcional. Sin embargo, hasta el momento, la Casa Blanca no ha aclarado el motivo específico de la resonancia ni el área del cuerpo que se examinó.
El informe médico disponible es bastante breve. Firmado por el doctor Sean Barbarella, menciona que Trump fue vacunado contra la influenza y el COVID, pero no proporciona detalles sobre por qué se realizó el estudio. En octubre, el presidente mencionó que el examen fue “perfecto” y que recibió “uno de los mejores reportes que han visto nunca” para su edad.
Moretones, hinchazón y explicaciones oficiales
La salud de Trump se ha convertido en un tema de intenso debate, especialmente luego de que aparecieron fotografías en las que se lo veía con moretones en la mano derecha y hinchazón en las piernas. En febrero, la Casa Blanca atribuyó esas marcas a los “constantes apretones de manos” que realiza el mandatario. Por su parte, en julio, el médico de Trump indicó que toma aspirina regularmente como parte de un “régimen cardiovascular preventivo”, señalando que los moretones eran efectos secundarios de este tratamiento.
La misma Leavitt comentó que Trump padece insuficiencia venosa crónica, una condición “benigna” frecuente en adultos mayores que podría explicar la hinchazón. Además, aseguró que no hay indicios de problemas más serios como trombos. Mientras tanto, el presidente sostiene que su salud es sólida y está dispuesto a compartir más detalles si se lo requieren.