Trump impulsa despidos para frenar el shutdown en EE. UU.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está en el centro de la polémica tras amenazar con despidos masivos en un intento de poner fin al cierre del gobierno federal, que ya lleva seis días. Esta situación ha puesto a Demócratas y Republicanos en una posición tensa, mientras ambos lados buscan negociar.
En el Senado, controlado por los republicanos, se planeaba votar nuevamente sobre diversas propuestas para financiar agencias federales. Había un proyecto de ley provisional que permitiría las operaciones hasta el 21 de noviembre, apoyado por la Cámara de Representantes, y una alternativa demócrata. Pero se anticipaba que ninguna de estas opciones contara con los 60 votos necesarios para avanzar.
El cierre de gobierno no es algo nuevo; de hecho, este es el 15º desde 1981. Compara esto con el cierre más largo de la historia, que duró 35 días entre 2018 y 2019, durante el mandato de Trump. Así que, sí, las tensiones en este tema son evidentes y han sido una constante en la política estadounidense.
Cuando se le preguntó sobre los despidos de trabajadores federales, Trump fue muy claro: “Ya está ocurriendo”. Culpa a los Demócratas por el punto muerto, aunque no brindó muchos detalles sobre cuántos podrían ser los despidos. La Casa Blanca ya advirtió que podrían prescindir de miles de empleados si el cierre se mantiene.
Por otro lado, el director de Presupuesto, Russell Vought, ya congeló alrededor de u$s28.000 millones en fondos destinados a infraestructuras en estados como Nueva York, California e Illinois, que cuentan con una gran cantidad de votantes demócratas.
A pesar de las tácticas de la Casa Blanca, los líderes demócratas no se han mostrado dispuestos a ceder. Este enfrentamiento ha generado descontento entre algunos republicanos centristas, que temen que esta estrategia haga más complicado el proceso para salir del shutdown.
Los demócratas, que buscan una extensión permanente de subsidios para ayudar a las personas a pagar el seguro médico, han rechazado el proyecto de financiamiento conocido como resolución continua en varias ocasiones. Con una mayoría de 53 a 47 escaños, los republicanos necesitan el apoyo de al menos ocho demócratas, pero hasta ahora han logrado que solo dos se alineen con ellos.
La situación sigue siendo crítica, y cualquier avance requerirá una considerable disposición de ambas partes para encontrar soluciones. En un marco político tan polarizado, la esperanza de un pronto acuerdo parece lejana, pero la presión aumenta con el tiempo.