La situación de SanCor, la cooperativa láctea que se encuentra al borde de la quiebra, ha generado una creciente preocupación entre sus trabajadores. Con la mayoría de sus plantas fuera de operación y en medio de un proceso de concurso de acreedores desde febrero, la presión sobre la dirección de la empresa se intensifica. La Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (ATILRA) ha denunciado el incumplimiento salarial total y exige transparencia respecto a las propuestas de reactivación presentadas por posibles inversores.
El gremio ha alertado que el 90% de las plantas industriales permanecen inactivas, lo que coloca a SanCor en una situación crítica. Sin la reactivación de la actividad productiva, los trabajadores temen que la empresa enfrente una quiebra inminente, lo que resultaría en la pérdida de empleos y la imposibilidad de cobrar sus salarios.
Condiciones Críticas en SanCor
La situación actual de SanCor es alarmante. La cooperativa ha dejado de operar en gran parte de su capacidad, y la falta de ingresos ha llevado a un estado financiero insostenible. ATILRA ha reiterado que los salarios adeudados son el único ingreso de sustento para muchas familias. La organización enfatiza que estos créditos tienen un carácter alimentario vital para la subsistencia.
En este contexto, el gremio exige que se informen de inmediato las propuestas de reactivación. Además, han anunciado un plan de lucha nacional para proteger los puestos de trabajo, incluyendo la realización de marchas al juzgado para reclamar que se cumplan las resoluciones que aseguran la continuidad operativa y la conservación del empleo.
Reactivación Parcial y Desafíos Persistentes
A pesar de la crisis, SanCor ha logrado una reactivación limitada en su planta de Devoto, Córdoba, gracias a un contrato de producción con Elcor. Este acuerdo, aunque no implica la cesión de marcas, permite la elaboración de productos con insumos proporcionados por Elcor, lo que genera ingresos inmediatos. Sin embargo, el sindicato advierte que esta reactivación no es suficiente para solucionar los problemas estructurales de la cooperativa.
SanCor enfrenta múltiples desafíos, incluyendo un pasivo que supera su activo declarado y problemas de abastecimiento de leche. La caída en la demanda del mercado interno y un modelo cooperativo que limita la inversión externa complican aún más la situación.
Un Momento Decisivo en el Concurso de Acreedores
El proceso judicial que atraviesa SanCor está avanzando, y ATILRA ha declarado que su prioridad es evitar una quiebra sin reactivación. Si no se reactiva la producción, el resultado será el cierre definitivo y el desguace de las plantas, han afirmado. El gremio busca involucrarse activamente en las decisiones sobre el futuro de la cooperativa, resaltando su impacto directo en los trabajadores.
La situación en SanCor es un claro reflejo de los desafíos que enfrenta la industria láctea en Argentina. Con la presión de los acreedores y la necesidad de reactivación, el futuro de la cooperativa depende de decisiones rápidas y efectivas. ¿Cómo pueden los trabajadores y los inversores colaborar para encontrar soluciones viables? Es fundamental mantener la comunicación y la transparencia en este proceso para asegurar un desenlace positivo para todos los involucrados.
