Robo al gobernador Jaldo durante un acto en Tucumán
El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, fue víctima de un sorprendente robo durante un evento oficial. El incidente ocurrió en la localidad de La Cocha, mientras participaba en la inauguración de una oficina de Atención Primaria Jurídica. Una mujer se acercó para saludarlo y, en un momento de distracción, le sustrajo el teléfono celular del saco.
Fotógrafos presentes capturaron el instante en que la sospechosa, posteriormente identificada como LNC, metió la mano en el bolsillo del gobernador. Las imágenes muestran a Jaldo posando con vecinos, entre ellos la mujer que perpetró el robo. La situación generó revuelo y se convirtió rápidamente en noticia.

La mujer fue detenida horas después
El gobernador se percató de la falta de su teléfono al subir a su vehículo para retirarse del acto. Inmediatamente, su equipo de seguridad comenzó a revisar las grabaciones del evento y a consultar con los asistentes. Pocas horas después, la policía local logró localizar a la sospechosa en su hogar, ubicado a unos siete kilómetros del lugar del robo.
A pesar de que la mujer afirmó que quería aclarar lo ocurrido y que planeaba devolver el teléfono, quedó detenida por orden del fiscal de turno, Fabián Assad, bajo la acusación de intento de hurto. Desde el entorno del gobernador, se comentó que el robo fue resultado de un exceso de confianza de Jaldo y de la rápida acción de la mujer. Sin embargo, no se confirmó si se accedió a información sensible contenida en el dispositivo. Tras el incidente, el gobernador decidió dar de baja la línea telefónica de forma preventiva y solicitó su reactivación.
La tensión política en Tucumán
Este episodio se produce en un contexto de tensión política en Tucumán, donde el gobernador Jaldo enfrenta una dura interna debido a la ruptura del pacto social, un acuerdo clave para la distribución de recursos entre el gobierno provincial y los municipios. La crisis se desató hace más de un mes cuando Jaldo dispuso la intervención del municipio de Juan Bautista Alberdi, tras la filtración de un audio que involucraba al intendente Luis Pato Campos en presuntos vínculos con el narcotráfico.
Campos, un dirigente peronista con un pasado como funcionario provincial, reconoció su voz en la grabación, pero negó cualquier relación con actividades ilegales. En el audio, registrado por un empresario, se oye un reclamo sobre el robo de una máquina de un predio municipal y una exigencia de pago de $16 millones. El empresario, que pretende postularse como intendente, afirmó que grabó el audio para exponer irregularidades.
En respuesta a estos acontecimientos, el gobernador Jaldo decidió intervenir tanto el Ejecutivo local como el Concejo Deliberante de Juan Bautista Alberdi, convocando a elecciones en un plazo de 180 días. Designó a Guillermo Norry, un dirigente con larga trayectoria en el Partido Justicialista, como interventor. Esta intervención ha intensificado la disputa interna en el partido y ha marcado una nueva fase en el conflicto político en Tucumán.
Este insólito incidente y la tensión política que rodea a la administración de Jaldo han captado la atención de los medios y de la ciudadanía, generando un clima de incertidumbre en la provincia.