El sector agrícola argentino enfrenta un nuevo capítulo de controversia en torno a las retenciones impositivas. La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), a través de su presidente Ignacio Kovarsky, ha manifestado que las retenciones son y serán un robo con cualquier gobierno. Este sentimiento de frustración se ha agudizado con la reciente gestión del actual presidente, Javier Milei, quien había prometido eliminar estos impuestos, pero no ha cumplido con su palabra.
La situación económica de los productores se vuelve cada vez más crítica. Kovarsky subraya que el sector agrícola, vital para el crecimiento del país, se ve limitado por un sistema impositivo que ahoga su desarrollo. La falta de acción concreta en la reducción de las retenciones ha dejado a muchos productores sin margen para operar, provocando un descontento generalizado en la comunidad agrícola.
Críticas a la Gestión Actual y Promesas Incumplidas
En su declaración, Kovarsky criticó la falta de avances en la eliminación de las retenciones, mencionando que el presidente dijo que al asumir las iba a sacar, pero no solo no lo hizo, sino que bajó parcialmente las tasas y ahora las posterga. Esta incertidumbre genera desconfianza entre los agricultores, quienes ven cómo sus ingresos se ven erosionados mientras esperan soluciones que parecen cada vez más lejanas.
La reciente decisión del gobierno de postergar la reducción de las retenciones para el trigo y la cebada hasta marzo de 2026 ha sido un golpe duro para el sector. La paciencia se está acabando y el bolsillo de los productores ya no aguanta más, advirtió Kovarsky, reflejando el malestar que se vive en el campo.
Impacto de las Retenciones en la Competitividad
Kovarsky enfatiza que las retenciones son un obstáculo para la competitividad del sector agrícola argentino. Exportar en Argentina se vuelve cada vez más complicado. Mientras países como Uruguay, Brasil y Paraguay no tienen retenciones, nosotros seguimos cargando con un peso adicional que nos saca de juego, afirmó, resaltando la necesidad de un entorno más favorable para la producción agrícola.
Además, el impacto de las políticas económicas en el sector tambero es significativo. A pesar de haber tenido años buenos, los costos están apretando a los productores. Con alimentos subsidiados por retenciones, parecía más viable, pero esta situación no es sostenible a largo plazo, argumentó Kovarsky, quien ve que la situación económica en la zona núcleo es cada vez más crítica.
Una Visión para el Futuro: Más Producción, Más Ingresos
Cuando se le preguntó sobre la relevancia de la eliminación de las retenciones para el bienestar de la sociedad en general, Kovarsky fue claro: No es una pelea entre sectores. Las retenciones representan apenas el 5% de los ingresos del Estado. Si producimos más y exportamos más, el Estado recauda más. Así podremos mejorar las condiciones de vida para todos, incluidos jubilados y trabajadores.
Este enfoque resalta la necesidad de una estrategia a largo plazo que no solo beneficie a los productores, sino que también impulse la economía nacional. Necesitamos aumentar la torta, no seguir repartiendo siempre la misma, concluyó Kovarsky, instando a un cambio en la política económica del país.
La discusión sobre las retenciones sigue siendo un tema candente en Argentina, con implicaciones significativas para el futuro del sector agrícola y la economía del país. ¿Cómo puede beneficiarte este programa? Es fundamental estar informado y participar en el debate, ya que el futuro de la agricultura en Argentina depende de decisiones clave en este ámbito.
Si deseas conocer más sobre este tema o compartir tu opinión, no dudes en explorar más información. El diálogo es esencial para construir un futuro mejor para el campo argentino.
