Quiénes son Andrew y Peggy Cherng, fundadores de Panda Express
A lo largo de la historia, muchas personas han logrado construir fortunas al combinar tradición y ambición. Un ejemplo claro de esto son Andrew y Peggy Cherng, quienes, guiados por un sueño y apoyados en recetas familiares, levantaron un imperio gastronómico que no para de crecer y mueve millones en Estados Unidos.
Desde ya hace tiempo, la gastronomía china se ha ganado el corazón de los paladares en todo el mundo. Pero esta pareja, inmigrantes con una fuerte conexión a sus raíces, supo transformar su herencia cultural en una marca sólida, con miles de empleados y locales en todo el país.
La historia de Andrew y Peggy Cherng: la pareja detrás de Panda Express
Andrew Cherng nació en China y Peggy en Birmania. Su historia comenzó en la Universidad de Baker, en Kansas, donde se conocieron. Luego, ambos continuaron su formación en la Universidad de Missouri; mientras él se enfocaba en matemáticas aplicadas, ella estudiaba ingeniería eléctrica.
En 1973, Andrew abrió un restaurante llamado Panda Inn junto a su padre. Diez años después, Peggy decidió dejar su empleo en el desarrollo de software y unirse al sueño familiar. Juntos, abrieron el primer Panda Express en un centro comercial de Los Ángeles.
La propuesta de ofrecer comida china rápida y accesible, adaptada a los gustos estadounidenses, capturó rápidamente la atención del público. Con el tiempo, su modelo de franquicia les permitió expandirse por todo el país. Hoy, dirigen la empresa como co-CEOs y lideran una cadena que cuenta con más de 1,600 restaurantes y emplea a más de 19,000 personas.
Miles de millones: el patrimonio de los Cherng
Las estimaciones más recientes indican que Andrew y Peggy Cherng poseen un patrimonio conjunto de alrededor de 3,100 millones de dólares. Esta fortuna proviene no solo de los ingresos generados por Panda Express, sino también de varias inversiones en diferentes sectores.
Ambos se encuentran entre las parejas empresariales más adineradas de Estados Unidos. Su historia es un claro reflejo de amor, tradición, visión estratégica y una pasión inquebrantable por compartir su cultura a través de la comida.