Pymes advierten sobre futuro incierto y comparan con 2001
El vicepresidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas, Eduardo Fernández, destacó las dificultades que enfrentan las pymes para mantener su producción. La situación de financiamiento se ha vuelto crítica, y esto se enmarca en una recesión que afecta al sector.
En una charla con Radio Rivadavia, Fernández expresó: “El futuro es sombrío. El crédito, que solía ser uno de los motores del mercado interno, hoy está totalmente descartado tanto para el consumo como para el financiamiento de las empresas”. Este comentario revela la seriedad de la crisis que estamos atravesando.
Los números del sistema financiero son alarmantes. Fernández explicó que en agosto el encaje total llegó al 30% y el de bonos al 9%. “Vamos a cerrar el mes con 53,5% y 18,5%, respectivamente. Esto significa tasas reales que son imposibles de afrontar”, advirtió.
Además, destacó que no solo es complicado sostener la producción, sino que ahora enfrentamos un sistema financiero restrictivo que busca protegerse a sí mismo, pero ahoga al aparato productivo. A medida que las pymes luchan por sobrevivir, el impacto en los trabajadores es evidente. “La movilidad laboral va a ser hacia la baja. Las pymes están en una situación límite: no quieren despedir, pero no pueden sostener sus plantillas. Detrás del cierre de cada empresa hay historias familiares y economías regionales que se desmoronan”, comentó.
Fernández realizó un paralelismo con la crisis de 2001 al señalar: “Cuando se sinceren las cifras y se mida la economía real, vamos a encontrar un desastre comparable al de aquella época. Hoy el país está destruyendo empleo y cerrando empresas que tardaron décadas en consolidarse”.
Pymes: advierten que el 33% de las empresas ya perdió mercado a manos de la importación
El 33% de las pymes industriales perdió mercado debido a productos importados en el segundo trimestre en comparación con el anterior, según un informe de la Fundación Observatorio Pyme. Este estudio, que analizó 407 empresas representativas, reveló que la cantidad de pymes que sienten amenazada por la importación subió al 45%, el nivel más alto desde 2007.
Sector por sector, la situación es preocupante. El 51% de las empresas textiles y de calzado indicó haber perdido mercado, seguido por el 42% en metalmecánica y el 37% en caucho y químicos. Los sectores de muebles y madera así como alimentos y bebidas también se encuentran en crisis.
De hecho, el 73,3% de las empresas señala a China como la principal amenaza, mientras que Brasil ocupa el segundo lugar con el 16,6%. También, el 45% de los empresarios considera que los productos importados compiten de manera desleal, y 35% opina que no cumplen con las normas técnicas.
Como resultado de esta competencia, la ocupación en las pymes industriales cayó 4,7% en el segundo trimestre en comparación con el año anterior, marcando nueve trimestres consecutivos de caída. En promedio, un 25% de las empresas reportó disminución en su plantilla.
Los datos oficiales del INDEC muestran que en junio las importaciones alcanzaron los u$s6.370 millones, un incremento del 35,9% interanual. Este aumento se relaciona con un crecimiento del 53,2% en las cantidades y una baja del 11% en los precios.
Al mirar las importaciones por uso económico, los bienes de consumo representan el 14%, casi el doble que en el año pasado. Además, piezas y accesorios son 19%, bienes intermedios 33%, combustibles y lubricantes 5,1%, y bienes de capital también representan el 19%.
Desde la Unión Industrial Argentina (UIA) expresaron que “la industria enfrenta un aumento en los costos internos que impacta negativamente en la competitividad de la producción nacional”. El primer semestre del año mostró que las importaciones de bienes de consumo llegaron a u$s5.268 millones, con un aumento del 32% respecto al 2023, cuando la producción industrial cayó 10%.