Protestas de puesteros de La Salada por apertura de negocios
Los feriantes de La Salada han iniciado una marcha hacia la fiscalía para exigir la reanudación de sus actividades comerciales, tras la detención de su dueño, Jorge Castillo. El evento se produce en medio de un clima de tensión, después de que la policía y los manifestantes se enfrentaran en Puente La Noria, donde se registraron incidentes con piedrazos y balas de goma.
Los puesteros, quienes se encuentran en el país por su participación en la cooperativa, han expresado su intención de esperar la llegada de más socios para unirse a la protesta. Este movimiento se ha intensificado después de una asamblea en la que confirmaron su decisión de marchar hacia la fiscalía para continuar con su reclamo.

Operativo policial y respuesta de los manifestantes
Para prevenir posibles cortes de ruta, se ha establecido un amplio operativo policial en la zona. Según informes, los trabajadores se han organizado para movilizarse a la Municipalidad de Lomas de Zamora, aunque no descartan volver a bloquear el Puente La Noria.
Desde las primeras horas de la mañana, los feriantes se han reunido con bombos y banderas, expresando su descontento con la situación actual. No tenemos nada que ver con Castillo; solo queremos trabajar, se puede leer en uno de los carteles que sostienen los manifestantes, quienes enfatizan que son familias que dependen de esta actividad económica.
Las posibilidades de acción que consideran incluyen marchar hacia la fiscalía, dirigirse al municipio o realizar un nuevo corte en el Camino Negro. A medida que las tensiones aumentan, el número de manifestantes ha crecido, con estimaciones de al menos 300 feriantes presentes en la protesta.
Cierre de La Salada y antecedentes
La clausura de La Salada, ordenada por la Justicia tras la detención de Jorge Castillo y otros 17 individuos por evasión y contrabando, ha llevado a la suspensión de las actividades en las tres ferias que conforman este complejo comercial en Ingeniero Budge. Los trabajadores de La Salada, incluidos carreros y otros, han prometido continuar movilizándose en busca de la reapertura.
La situación sigue siendo crítica, y los feriantes se mantienen firmes en su lucha por recuperar sus medios de vida, con un futuro incierto que depende de las decisiones judiciales y la respuesta de las autoridades.