La investigación sobre el trágico crimen en Villa Crespo ha revelado nuevos detalles que profundizan en el trasfondo psiquiátrico del caso. Se ha confirmado que la carta hallada en el departamento fue escrita por Laura Leguizamón, la mujer que, en un acto de violencia, asesinó a su pareja, Adrián Seltzer, y a los hijos de este, Ivo e Ian, de 12 y 15 años respectivamente, antes de quitarse la vida.
Según fuentes policiales, expertos de la Policía Científica llevaron a cabo un análisis caligráfico del documento, una hoja A4 manchada de sangre. Este análisis reveló coincidencias con cuadernos escolares de los hijos, libretas de la pareja y formularios oficiales previamente completados por Leguizamón, descartando la posibilidad de que otro miembro de la familia hubiera redactado el mensaje.
Contenido de la carta y su significado
La carta encontrada en la escena del crimen presenta un estilo fragmentado, con frases sueltas e incoherentes. Expresiones como Fue mucho. Los amo. Lo siento. y Todo mal, muy perverso dan cuenta del estado emocional de la autora en sus últimos momentos. Expertos han señalado que la mezcla de imprenta y cursiva, junto con un trazo tembloroso, sugiere que Leguizamón no estaba en un estado mental óptimo al momento de escribir.
La mujer estaba en tratamiento psiquiátrico por esquizofrenia y depresión, condiciones que requerían medicación. Este contexto ha sido enviado al juzgado encargado de la causa, donde se está analizando junto a otros elementos para reconstruir con mayor precisión lo sucedido.
El síndrome de Amok: una posible explicación
En el marco de la investigación, ha comenzado a surgir la hipótesis de que el síndrome de Amok podría haber influido en el comportamiento de Laura Leguizamón. Este trastorno psicológico, poco frecuente y culturalmente reconocido, se manifiesta tras períodos de aislamiento o tensión emocional intensa. El término proviene del sudeste asiático y describe un comportamiento de atacar con furia sin control.
Los expertos en salud mental han indicado que este síndrome suele asociarse a contextos psicóticos o depresivos, donde las personas pueden experimentar episodios de violencia súbita, frecuentemente seguidos de suicidio. A pesar de que no se considera un diagnóstico independiente en el DSM-5, es reconocido como un síndrome cultural que puede aparecer en individuos con antecedentes de problemas psiquiátricos.
Hallazgos en la escena del crimen
Además de la carta, en la escena del crimen se encontraron envases vacíos de medicamentos como Sertralina, un antidepresivo, y Olanzapina, un antipsicótico. Este hallazgo sugiere que Leguizamón podría haber estado atravesando un episodio de descompensación emocional o un brote psicótico que la llevó a cometer el trágico acto de violencia.
La situación en Villa Crespo es un trágico recordatorio de la complejidad de los problemas de salud mental y cómo pueden influir en comportamientos extremos. La investigación continúa, y se espera que se esclarezcan más detalles sobre las causas que llevaron a esta devastadora tragedia.
Es fundamental reflexionar sobre el impacto de la salud mental en nuestra sociedad y la necesidad de brindar apoyo adecuado a quienes lo requieren. La prevención y la comprensión son claves para evitar que sucesos como este se repitan en el futuro.
