Por primera vez desde enero, los salarios en el país podrían superar la inflación en mayo, según un análisis de Synopsis. Esto se daría si el índice de precios al consumidor (IPC) se mantiene por debajo del 2,4%, que es el ajuste promedio acordado en las paritarias. Las estimaciones privadas sugieren un aumento en el IPC en torno al 2% para el mes que acaba de concluir.
Esta posible recuperación de los salarios es significativa, ya que en meses anteriores, los aumentos acordados en paritarias habían sido inferiores al aumento del IPC. En particular, en marzo, la inflación alcanzó el 3,7%, mientras que los acuerdos salariales solo ofrecieron un incremento del 1,9%.
Paritarias y Aumentos Salariales
Hasta ahora, sólo cinco acuerdos salariales han registrado aumentos inferiores al 2% mensual. Entre estos se encuentra el Sindicato de Comercio, que firmó sumas fijas adicionales a su aumento del 1,8%. A pesar de que el promedio de aumentos por mes se ha mantenido por debajo de la pauta de ajuste del 1% mensual promovida por el Gobierno, se observa un ligero descenso en el promedio de suba mensual, que pasó de 1,9% a 1,6% en el segundo trimestre.
En términos anualizados, las paritarias contemplan aumentos del 36,5% en mayo, una disminución respecto al 37,7% del mes anterior. Aunque la tendencia decreciente se interrumpió en abril, se observa que en marzo de 2024, los ajustes salariales tenían un ritmo de 233%.
Ganadores y Perdedores en el Mercado Laboral
Al finalizar el primer cuatrimestre del año, se evidencia que, con excepción de los gremios SMATA y Bancarios, todos los grandes sindicatos están por debajo de la inflación acumulada del 11,6%. Esto se debe al rezago de los salarios respecto al incremento de precios. Por ejemplo, los mecánicos recibieron un aumento trimestral que les permitió superar al IPC en un 5,6%, mientras que los bancarios lograron empatar sus aumentos.
Sin embargo, para la mayoría de los sectores, las pérdidas salariales varían desde el 3% para los Estacioneros hasta el 7,9% para los Ferroviarios.
Este panorama pone de manifiesto la importancia de seguir de cerca la evolución de los salarios y la inflación, ya que impacta directamente en el poder adquisitivo de los trabajadores. Mantenerse informado sobre estos cambios es fundamental para la planificación financiera personal y laboral.
