Los Grobo registra pérdidas de $81.000 millones y deudas de u$s220 millones
En medio de un proceso de quiebra, Los Grobo ha revelado su balance al 30 de junio de 2025, y la situación no es nada sencilla. La empresa ha enfrentado pérdidas de $81.006 millones y, para colmo, sus ingresos cayeron a $361.000 millones, un 32% menos comparado con el año anterior. Actualmente, su patrimonio neto está en números rojos, alcanzando los $68.225 millones negativos. Además, los síndicos del concurso han verificado que el pasivo total se eleva a aproximadamente u$s220 millones, compuesto por $70.124 millones y u$s151 millones. Como respuesta, Los Grobo está intensificando esfuerzos para vender activos y llegar a acuerdos comerciales que le permitan seguir en funcionamiento.
Pasivo en aumento y acuerdos judiciales
El informe presentado por los síndicos ante el juez Diego Hugo Papa muestra que se han admitido créditos privilegiados por $18.720 millones y u$s84,4 millones, así como otros créditos que complican aún más el panorama financiero. La deuda es diversa y está distribuida entre entidades financieras, organismos fiscales y proveedores del sector agropecuario, lo que refleja una estructura de pasivos bastante compleja.
Acuerdos estratégicos con acreedores
Para sobrellevar la situación, la empresa mantiene más de 550 acuerdos con acreedores, amparados en el artículo 20 de la Ley de Concursos y Quiebras. Estos contratos permiten compensar parte de las deudas a través de la entrega de granos. Por ejemplo, ofrecen una bonificación de u$s7 por tonelada de soja o girasol y u$s5 para cereales, una movida que busca mantener la operativa de la empresa y reducir su pasivo comercial.
Respaldo de socios y situación actual
Todo este movimiento cuenta con el apoyo del grupo brasileño Amaggi, que actúa como garante en estas operaciones y también es uno de los acreedores principales en este concurso. Se especula, incluso, que Amaggi podría aumentar su participación en el capital accionario de Los Grobo, dado su alto nivel de exposición financiera con la compañía argentina.
Estrategias de reestructuración
El balance también revela que más del 60% del pasivo corresponde a deudas financieras y comerciales, lo que indica que la empresa está en una situación delicada. Con activos corrientes de $150.000 millones y pasivos de $218.000 millones, su ratio de liquidez está por debajo de 0,7, limitando su capacidad operativa.
Frente a este panorama, se ha definido un plan de reestructuración que incluye ajustes en la plantilla, venta de activos no estratégicos y un enfoque en las unidades de negocio más rentables. Por ejemplo, ya se concretó la venta del Molino Cánepa, cuyo capital se destinará a atender parte de la deuda. Además, se comenta que Molinos Fénix es un potencial comprador, aunque esto aún debe ser aprobado judicialmente.
La compañía también ha reorganizado su estructura productiva, suspendiendo siembras directas y priorizando contratos de origen de granos e insumos para reducir su exposición financiera. La plantilla de empleados se ha reducido de 470 a 250 siguiendo un procedimiento preventivo de crisis respaldado por la Secretaría de Trabajo.
Con más de 500 clientes activos, Los Grobo ahora busca estabilizar sus operaciones y alcanzar 700.000 toneladas de originación en el próximo ciclo. En un informe presentado, se destacó que las pérdidas se deben al encarecimiento del crédito, la caída de precios agrícolas y los costos del proceso de reestructuración. El foco principal seguirá siendo la comercialización de granos e insumos mediante acuerdos estratégicos con exportadores y proveedores.
Por último, la propuesta formal de pago a los acreedores debe presentarse antes del 5 de agosto del año entrante. Con un patrimonio neto negativo y una deuda que supera los u$s220 millones, Los Grobo se encuentra en una etapa crítica, priorizando la reconstitución de su capital y reorganización en el competitivo panorama agropecuario argentino.