Las farmacéuticas pelean por el mercado de la pérdida de peso

El mercado global de medicamentos para la obesidad está en plena efervescencia. Las grandes farmacéuticas y las startups biotecnológicas están compitiendo por un lugar en un negocio que se espera alcance hasta 150.000 millones de dólares anuales en la próxima década. Este año, la lucha se intensificó, y cada vez más personas, ya sean pacientes o inversores, están muy atentas a lo que sucede.

Históricamente, este sector ha estado dominado por empresas como Novo Nordisk y Eli Lilly. Han avanzado de tratamientos inyectables a innovaciones que prometen no solo eficacia, sino también formas de administración más cómodas, como cápsulas para tomar por vía oral.

La competencia entre estas empresas ha elevado el interés en el tratamiento de la obesidad, convirtiéndolo en uno de los campos más rentables de la farmacia. Novo Nordisk, por ejemplo, popularizó medicamentos como Wegovy y Ozempic, y está ampliando su gama con nuevos fármacos como amycretin y CagriSema, que buscan mejorar los resultados y las opciones de administración.

Empresas con pipeline diverso

En sus pruebas, amycretin mostró que podría llevar a una pérdida de peso de hasta 14,5% en pacientes con diabetes tipo 2, y los efectos secundarios son en su mayoría leves a moderados. Por otro lado, CagriSema, una inyección que combina semaglutida con otro péptido, ha tenido resultados más modestos en ensayos recientes, aunque se espera que pida aprobación regulatoria a principios de 2026.

Eli Lilly ha visto un impacto positivo en su valor de mercado, superando el billón de dólares gracias a sus tratamientos contra la obesidad. La compañía no se queda atrás y sigue investigando nuevas moléculas con estrategias terapéuticas que prometen ofrecer beneficios adicionales a los tratamientos actuales.

Nuevos jugadores farmacéuticos y formatos orales

Además de los gigantes, empresas como Pfizer están entrando al sector al adquirir biotecnológicas con fármacos prometedores. Por ejemplo, después de comprar Metsera, Pfizer se adentró en tratamientos como MET-097i, que es una terapia de GLP-1 de administración mensual. En ensayos intermedios, este tratamiento ha logrado pérdidas de peso de alrededor del 14% tras 28 semanas.

Este enfoque muestra una tendencia clave en el sector: la búsqueda de medicamentos que sean de administración menos frecuente o en formato oral, incrementando así la comodidad del paciente y ampliando el acceso a más personas que no desean recibir inyecciones.

También hay nuevas startups explorando tratamientos que complementan los GLP-1 tradicionales. Se desarrollan terapias que actúan sobre diferentes vías hormonales o metabólicas, además de innovaciones basadas en ARN y estrategias específicas para reducir la grasa corporal. Estas alternativas podrían competir directamente con los tratamientos líderes cuando superen la etapa de ensayos clínicos.

A pesar del optimismo, el camino no es fácil. Algunos candidatos han tenido resultados mixtos en pruebas, y los organismos reguladores exigen datos sólidos sobre seguridad y eficacia antes de aprobar nuevos tratamientos. Además, la creciente presencia de versiones genéricas puede afectar los precios y cambiar la dinámica del mercado global.

Botão Voltar ao topo