Las empresas internacionales ajustan sus proyecciones de crecimiento para 2025
Las perspectivas de crecimiento empresarial han empeorado en lo que va de 2025, según una reciente encuesta de KPMG Internacional. Este ajuste se debe principalmente a la volatilidad económica global y la incertidumbre geopolítica que afecta a las compañías en todo el mundo.
La encuesta, que abarcó a 2.000 altos ejecutivos, revela que casi el 47% de los consultados ha revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento desde enero. Las principales preocupaciones que enfrentan son la volatilidad macroeconómica, mencionada por el 34% de los encuestados, y la incertidumbre geopolítica, que afecta a un 30% de los líderes empresariales.

Impacto de la incertidumbre global
Esta situación ha llevado a los CEO a replantear sus estrategias. La combinación de factores como las políticas regulatorias, los desafíos tecnológicos y la fragilidad de las cadenas de distribución también han contribuido a la cautela de las empresas. KPMG estima que el crecimiento del PBI mundial se desacelerará del 3,2% registrado en 2024 a un 2,7% en 2025, niveles no vistos desde la crisis financiera de 2008.
Estrategias para enfrentar la crisis
Regina Mayor, directora Global de Clientes y Mercados de KPMG, señala que los ejecutivos están adoptando un enfoque de pausa y preparación, retrasando decisiones de inversión significativas mientras se preparan para posibles recesiones. Mayor enfatiza la importancia de identificar oportunidades y gestionar riesgos geopolíticos como activos estratégicos.
El equipo Geopolítica Global de KPMG describe el actual escenario internacional como una recesión crítica, donde el dominio global de Estados Unidos está en declive, y emergen potencias como India y Brasil. Este cambio conlleva un entorno geopolítico más disputado, incrementando el riesgo de conflictos globales que pueden afectar las cadenas de suministro.
Desafíos en América y la excepción de Brasil
El informe de KPMG destaca que la incertidumbre política y comercial en América está llevando a una desaceleración del crecimiento en la región, que se espera que baje a 2,7% en 2025. Sin embargo, Brasil se presenta como una excepción, gracias a sus relaciones comerciales con China, lo que le permite mitigar algunos efectos negativos de las políticas estadounidenses.
Perspectivas en Europa y Asia-Pacífico
En Europa, el crecimiento del PBI se proyecta en torno al 0,9% para 2025, mientras que las diferencias entre las economías del continente pueden llevar a resultados divergentes. En Asia-Pacífico, las economías dependen en gran medida del comercio internacional, lo que las hace vulnerables a los cambios en las políticas comerciales de Estados Unidos.
KPMG prevé que el crecimiento del PBI en Singapur podría caer hasta un 3% a principios de 2026, mientras que en China se espera una desaceleración del 0,5% para finales de 2025. La situación en Japón y Corea del Sur también es preocupante, con expectativas de crecimiento negativo en los próximos años.
La actual incertidumbre económica y geopolítica requiere que las empresas desarrollen una visión clara sobre cómo estas tendencias afectarán sus objetivos estratégicos a corto y largo plazo. Navegar en este entorno turbulento es un desafío que puede transformarse en oportunidades si se maneja adecuadamente.