La trayectoria de Chase Coleman
En el mundo de las inversiones, no todos empiezan desde el mismo lugar. Algunos, como Chase Coleman, tienen la suerte de nacer en familias adineradas que les permiten abrir muchas puertas. Pero lo que lo diferencia es su capacidad de multiplicar su fortuna y convertirse en uno de los referentes del mercado financiero global.
A pesar de sus privilegios, Coleman nunca se quedó de brazos cruzados. Actualmente, se encuentra entre los empresarios más ricos de Estados Unidos, aprovechando cada oportunidad para expandir tanto su influencia como su capital.
¿Quién es Chase Coleman y cómo se volvió multimillonario?
Chase nació en Long Island en 1975, en una familia de renombre. Su abuelo, Charles Payson Coleman, fue un destacado socio de un bufete de abogados en Nueva York, y su madre se dedicaba al diseño de interiores. Desde pequeño, tuvo acceso a una educación de élite. Estudió en la Academia Deerfield y luego se graduó del Williams College en 1997.
Su entrada al mundo de las finanzas ocurrió gracias al legendario inversor Julian Robertson, quien fundó el famoso fondo Tiger Management. Después del cierre de esa firma, Robertson le confió la gestión de 25 millones de dólares para que Chase fundara su propio fondo: Tiger Global Management. Así, empezó a construir su imperio financiero.
Estrategia y crecimiento
Lo que caracteriza a Coleman es su habilidad para combinar audacia con inteligencia. Apostó por tecnologías emergentes en momentos en que muchos no se atrevían. Facebook, LinkedIn y Spotify fueron algunas de sus primeras inversiones que resultaron exitosas. Gracias a su visión, fue reconocido como uno de los “Tiger Cubs”, un grupo de jóvenes inversores que aprendieron bajo la tutela de Robertson.
Con el tiempo, Tiger Global Management creció hasta manejar más de 50.000 millones de dólares en activos, diversificando su cartera e incorporando capital de riesgo, lo que consolidó aún más a Coleman como una figura influyente en Wall Street.
El patrimonio de Chase Coleman
En 2025, Forbes estimó que su patrimonio supera los 7.000 millones de dólares, posicionándolo entre los 600 más ricos del mundo. Esta cifra habla no solo de su herencia sino también de su capacidad para adaptarse a los constantes cambios del mercado.
Hoy en día, Chase sigue liderando Tiger Global, con inversiones que van desde startups tecnológicas hasta proyectos de energía sostenible. Su historia demuestra cómo el poder económico y las oportunidades pueden moldear el destino de quienes nacen en la riqueza.