La baja de la pobreza podría estar sobreestimada, según la UCA
La reciente disminución de la pobreza anunciada por el Gobierno podría ser menor de lo que se informa oficialmente. Aunque existe un proceso de mejora, analistas del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) advierten que la reducción de la pobreza está sobreestimada en 4 o 5 puntos.
Los especialistas señalan que los datos sobre salarios, consumo y tasa de empleo no coinciden con la fuerte caída en los índices de pobreza que presenta el Ejecutivo. Este desajuste podría atribuirse a un cambio en los hábitos de consumo que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) no ha registrado adecuadamente, así como a modificaciones en la metodología de recolección de datos implementadas en 2024.

La visión de la UCA sobre la pobreza
Según el informe del Ministerio de Capital Humano, basado en datos del INDEC, la pobreza habría disminuido a 31,7% en el primer trimestre de este año. Sin embargo, Agustín Salvia, director del Observatorio de la UCA, destaca que, si bien se puede aceptar que hay una mejora, el INDEC debe informar si ha habido cambios metodológicos que justifiquen las cifras presentadas.
Salvia también critica la falta de actualización en la canasta básica utilizada para medir el índice de precios al consumidor (IPC). Explica que las cifras oficiales sobre ingresos y pobreza han sido raras desde el tercer trimestre de 2024. Aunque se podría esperar una recuperación en los ingresos y una reducción en la pobreza, la magnitud de esta caída parece estar por encima de lo pronosticado por otras fuentes.
Percepción pública y cambios en el consumo
Un dato relevante es que, de acuerdo con la UCA, el 47% de la población considera que sus ingresos no son suficientes. Esta percepción está vinculada al cambio en la composición del consumo, que no es captado adecuadamente por el INDEC. A pesar de reportar mejoras en los ingresos, las personas destinan una porción significativa a pagar tarifas, lo que afecta su capacidad de consumo.
Salvia también indica que la baja en la inflación ha permitido al público tener una mejor estimación de sus ingresos, ya que pueden recordar cuánto ganaron el mes anterior, algo que resulta difícil en contextos de alta inflación. Además, el cambio en el sistema de precios no se refleja en la canasta básica, lo que podría incrementar la discrepancia en los números oficiales.
Con la estabilidad en la inflación, se espera que se continúe observando un cambio en la percepción de los ingresos por parte de la población. Sin embargo, es crucial que las metodologías y las canastas utilizadas para medir estos indicadores se actualicen para reflejar con precisión la realidad económica de los ciudadanos.
Para entender mejor la situación actual de la pobreza y los ingresos en Argentina, es fundamental seguir de cerca las actualizaciones sobre estos indicadores y cómo afectan la vida cotidiana de las personas. Comparte esta información para que otros también puedan estar al tanto de estos importantes temas económicos.