Kicillof solicita a empresarios invertir y pagar impuestos en Argentina
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, estuvo presente el jueves en el Teatro Metro de La Plata para la presentación del libro “El país que quieren los dueños”, escrito por el periodista y economista Alejandro Bercovich. Durante el evento, Kicillof hizo una clara distinción entre los empresarios comprometidos que invierten y aquellos que evaden responsabilidades. Hizo un llamado a fomentar un modelo de desarrollo que incluya al Estado, a los trabajadores y al sector privado.
Kicillof destacó que ciertos grupos de poder respaldaron a quienes, durante la dictadura militar, “destruyeron el tejido industrial” del país. Cuestionó cómo era posible que apoyaran a sus verdugos, algo que consideró un suicidio industrial. Según su opinión, esto estaba relacionado con una venganza oligárquica contra el peronismo, que tradicionalmente ha buscado otorgar derechos a los trabajadores.
El gobernador también mencionó que, para comprender el comportamiento de estos grupos económicos, es necesario observar el conjunto, no solo a una empresa o a su dueño. “Se debe considerar al grupo económico que tiene intereses en varios sectores, como la agricultura, la industria y las finanzas”, explicó.
Kicillof subrayó que el enfoque del peronismo no es confrontar con todo el capital, sino construir un modelo de desarrollo conjunto. Resaltó que el debate no debería centrarse en si todo debe ser estatal o privado. “El peronismo nunca buscó destruir a los empresarios; siempre se trató de trabajar juntos para desarrollar Argentina. El Estado, los trabajadores y los empresarios que realmente invierten son quienes pueden hacer crecer nuestro país”, afirmó.
A lo largo de su discurso, también distinguió entre aquellos que crean empleo y cumplen con la ley, y aquellos que buscan beneficiarse de forma indebida. Reconoció que la mayor parte del empleo en Argentina proviene del sector privado y que no se necesita que haya menos empresas. El foco, según Kicillof, debe estar en exigir que se cumplan las leyes y que inviertan en el país para generar trabajo.
El gobernador hizo énfasis sobre los que “hacen subterfugios para no pagar impuestos”, señalando que esos mismos actores son los que a menudo piden más Estado para contar con infraestructura como autopistas, aeropuertos, y universidades.
Puso como ejemplo la recuperación de YPF y el desarrollo de Vaca Muerta, mencionando que “no fue un milagro”, ya que antes Repsol no había hecho inversiones significativas, y subrayó la importancia de mantener activos estratégicos bajo control estatal.
Kicillof también llamó la atención sobre los llamados “grandes unicornios” y otros magnates del sector tecnológico, instando a aquellos que hicieron su fortuna en Argentina a quedarse en el país, pagar impuestos y contribuir a su desarrollo. Añadió, con un toque de ironía, que aquellos que se alejaron por desacuerdos con gobiernos anteriores deberían ahora sentirse motivados a estar aquí y cumplir con sus obligaciones fiscales.
En una reflexión sobre el pasado, mencionó que hubo una época donde los grandes empresarios eran valorados por su aporte a la sociedad. Habló sobre cómo figuras como Henry Ford lograron que sus trabajadores pudieran adquirir lo que producían, mostrando un compromiso social significativo.
Kicillof finalizó la presentación con un llamado al nacionalismo empresarial. Pidió a los empresarios que se preocupen por su país, respeten, valoren y quieran a su gente. Hizo énfasis en que la riqueza que poseen fue generada en gran parte gracias al trabajo argentino y que es vital que impulsen el bienestar y desarrollo de todo el país, no solo de un sector privilegiado.