El riesgo es parte del juego, pero cada jugador tiene su límite. Cada inversor tiene su perfil, y este determina el nivel de riesgo que está dispuesto a aceptar. Comprender este perfil es esencial para asignar adecuadamente activos a tu cartera de inversiones.
Durante la juventud, muchos inversores sienten que tienen toda la vida por delante. El riesgo no parece importar y, generalmente, el capital invertido es limitado. Sin embargo, a medida que se avanza en la vida, factores como la casa, el auto y la familia aumentan las responsabilidades financieras, llevando a los inversores a adoptar una postura más conservadora.
La Evolución del Riesgo en el Tiempo
Con la edad, el riesgo deja de interesar a muchos. El horizonte temporal se acorta y una caída del mercado puede generar preocupaciones significativas. Aunque un conejo puede correr más rápido, muchos eligen ser como la tortuga, avanzando con seguridad hacia sus metas financieras.
Este comportamiento se traduce en un concepto clave en finanzas: la aversión al riesgo. A medida que se acumula experiencia y se enfrentan crisis, este rechazo al riesgo tiende a intensificarse.
¿Sos Conservador, Moderado o Agresivo?
Los inversores que se identifican como arriesgados suelen ignorar los activos de renta fija y se centran en acciones especulativas, adoptando estrategias como el swing trading. Algunos pueden optar por un portafolio 100% en renta variable, pero es crucial mantener una posición asegurada con activos no volátiles o liquidez para aprovechar oportunidades sin necesidad de deshacerse de otras posiciones.
Por otro lado, el inversor conservador evita la renta variable, buscando retornos mínimos incluso por debajo de la inflación. Este perfil prefiere inversiones seguras, como bonos del Tesoro estadounidense (T-Bills) o bonos de países con un buen historial de pagos, priorizando la preservación del capital.
En un punto intermedio se encuentra el perfil moderado, que diversifica su cartera incluyendo tanto renta fija como acciones de crecimiento y una pequeña parte destinada a trading activo. Esta distribución es generalmente recomendada, aunque cada inversor debe adaptar las proporciones a su apetito de riesgo.
¿Cómo Reaccionarías en un Mercado Bajista?
Al observar los últimos 20 años del S&P 500, se pueden identificar caídas significativas, como las de la burbuja .com, la crisis subprime y el desplome durante el COVID-19. Es crucial reflexionar sobre cómo se habrían manejado esos momentos difíciles y qué decisiones se tomarían frente a un escenario de mercados bajistas.
En conclusión, es fundamental realizar un análisis honesto sobre tu experiencia en el mercado y cuántas crisis has atravesado. Estar preparado para mantener tu capital invertido durante largos ciclos bajistas es esencial, ya que el mercado es cíclico y eventualmente otro gran ciclo bajista llegará.
Creador de Doctor de tus Finanzas y asesor financiero independiente.
