Gobernadores se preparan para reunión con Javier Milei fortalecido
Un grupo considerable de gobernadores se reunirá este jueves en la Casa Rosada con Javier Milei, quien busca reforzar su fuerza política para llevar adelante su ambiciosa agenda de reformas en el Congreso. Este encuentro marca un cambio significativo en la relación del Presidente con los jefes provinciales, muchos de los cuales sufrieron las repercusiones de los últimos resultados electorales que le mostraron a La Libertad Avanza una victoria clara en gran parte del país. “El que ahora define la agenda es el Presidente”, aceptan sin rodeos los mandatarios.
Milei, tras obtener resultados favorables en las elecciones en todo el país, está decidido a reconstruir su dañada relación con las provincias. Siguiendo un estilo muy a lo Trump, el Presidente mezcla la negociación con la firmeza. Primero, cosechó una avalancha de votos; ahora, moderará su discurso y buscará ofrecerle a Washington una imagen sólida y digna para respaldar las decisiones que están por venir.
Javier Milei retoma contacto con los gobernadores
Ámbito ha confirmado que asistirán mandatarios como Osvaldo Jaldo (Tucumán), Carlos Sadir (Jujuy), Raúl Jalil (Catamarca), Jorge Macri (CABA), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Claudio Poggi (San Luis), Alberto Weretilneck (Río Negro), Leandro Zdero (Chaco), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Gustavo Valdés (Corrientes), Marcelo Orrego (San Juan), Hugo Passalacqua (Misiones) y Gustavo Sáenz (Salta), entre otros.
Por Mendoza, la vicegobernadora Hebe Casado asistirá, ya que Alfredo Cornejo tiene compromisos en el exterior. Lo mismo ocurre con el neuquino Rolando Figueroa, que viajó a Brasil. En Córdoba, aún se espera la confirmación de Martín Llaryora.
Quedaron afuera del convite los líderes más duros del peronismo opositor: Axel Kicillof (Buenos Aires), Ricardo Quintela (La Rioja), Sergio Ziliotto (La Pampa), Gildo Insfrán (Formosa), Gustavo Melella (Tierra del Fuego) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero).
El Gobierno busca hacer borrón y cuenta nueva, alejándose de la controversia electoral y recuperando los apoyos legislativos que solía tener. Para ello, es crucial contar con la intermediación de los gobernadores, especialmente aquellos que han mostrado voluntad de diálogo en varias ocasiones. Los principales referentes de esta diplomacia son el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro del Interior, Lisandro Catalán, que buscan un camino intermedio.
Por un lado, se encuentran los seis líderes que componen el nuevo frente Provincias Unidas: Pullaro, Llaryora, Valdés, Sadir, Torres, y el santacruceño Claudio Vidal. Este frente “federal” comenzó su andanza con un rendimiento modesto, logrando su única victoria en Corrientes. En Córdoba y Santa Fe sufrieron reveses significativos y también perdieron en las demás provincias donde compitieron, siendo superados por La Libertad Avanza y, en algunos casos, por el peronismo.
Estos dirigentes ya han expresado su disposición a discutir reformas fiscales y laborales. “Necesitamos dar sensatez a los debates. Hay que encontrar un equilibrio entre quienes imponen impuestos y quienes generan trabajo”, dijeron antes de las elecciones.
Con la reunión presidencial a la vista, manifestaron sus expectativas de que sea un espacio para negociar reformas estructurales. “Hoy hay una gran oportunidad para concretar acuerdos que permitan avanzar en la reforma laboral, tributaria y previsional, entre otras”, aseguraron desde uno de los distritos que forman parte del bloque.
Sin embargo, desde otra provincia, dejaron claro que no habrá un planteamiento conjunto entre los gobernadores hacia la Nación: “No hay margen para ir organizados con algo”. Como reflexionaron: “Hay gobernadores que ganaron por el 50%, otros que tuvieron mucha suerte y otros que perdieron por amplio margen. Ahora la agenda la define el Presidente. Tendremos que ver cuáles son los temas que plantee”.
En un encuentro reciente, Pullaro anticipó que “apoyarán todo lo que consideren acertado y las reformas que sean necesarias: reforma laboral, tributaria”. Él subrayó que “no podemos seguir con la carga impositiva actual” y que hay que eliminar ciertos impuestos, como las retenciones y el impuesto al cheque.
Asimismo, pidió “mejores leyes laborales, no solo para los empresarios, sino también con una mirada hacia las pymes y los trabajadores”. “Queremos generar empleo. Vamos a trabajar por eso, siempre defendiendo a Santa Fe y al interior productivo”, agregó.
Entre los apoyos al Gobierno, se destacan los mandatarios que sellaron alianzas electorales con la escudería de Milei: Frigerio, Cornejo y Zdero. Los tres lograron victorias sobre el peronismo en sus respectivas provincias. La misma situación vivió Jorge Macri, quien, aunque a regañadientes, aceptó coordinar con los nuevos líderes presidenciales, siempre listos para obstaculizar los planes del Gobierno porteño en la Legislatura.
La administración de Milei también busca atraer a las fuerzas provincialistas, que sufrieron derrotas en las elecciones. En Río Negro, la figura del gobernador Alberto Weretilneck terminó en tercer lugar y perdió dos bancas que ponía en juego, mientras que Rolando Figueroa no ganó, pero sí obtuvo una banca en la Cámara alta.
La reunión de este jueves será particular para Milei. Aunque al comienzo de su mandato recibió a todos los 24 gobernadores, luego delegó esos encuentros a Francos y otros miembros de su gabinete. Desde entonces, el Presidente ha optado por reunirse con un pequeño grupo de mandatarios dialoguistas, evitando grandes fotos y eventos. De hecho, la última gran ocasión que se recuerda fue el 9 de julio de 2024, durante el Pacto de Mayo.