Gobernadores peronistas discuten estrategia en cumbre del PJ
El triunfo del gobernador Axel Kicillof en la elección contra La Libertad Avanza (LLA) ha generado un revuelo en el entorno de los gobernadores peronistas. Para muchos, este resultado es un claro indicio de que el Gobierno nacional está atravesando un momento complicado. Ante esta situación, los mandatarios se han reunido nuevamente para crear una agenda común de campaña, especialmente con las elecciones legislativas a la vuelta de la esquina, el 26 de octubre.
La estrategia es clara: algunos gobernadores, incluido Gustavo Sáenz, quieren articular esfuerzos con sus colegas para lograr mayores adhesiones a su causa. Aún se discute si se reunirán en la sede del PJ Nacional esta semana para coordinar sus pasos. Sáenz, en particular, ha expresado críticas directas hacia la gestión en la Casa Rosada, afirmando que “el Gobierno se quedó con lo peor y no ha escuchado al pueblo”.
La mayoría de los mandatarios peronistas, a excepción del formoseño Gildo Insfrán, está alineada en celebrar el éxito de Kicillof. Otros líderes como Osvaldo Jaldo de Tucumán y Ricardo Quintela de La Rioja también han hecho públicas sus felicitaciones. La ministra de Educación de Neuquén, Soledad Martínez, incluso extendió sus saludos a Kicillof y al intendente de Ensenada, Mario Secco. La tensión con el Gobierno se siente en el aire, especialmente por la falta de obras públicas, un tema que resuena fuerte en las provincias.
Todo esto nos lleva a pensar en cómo se reorganizará el liderazgo del peronismo a nivel nacional. La opinión general es que Kicillof podría asumir un rol más protagónico, apoyado por figuras clave como Cristina Kirchner y Sergio Massa. Esta semana, algunos mandatarios planean viajar a la capital para discutir una campaña conjunta que una sus fuerzas ante el desafío electoral.
Aunque todavía no se han confirmado los viajes de Jaldo y Quintela a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, es evidente que todos están atentos a cómo se mueve el Gobierno. Se habla de que la situación económica influirá en estas decisiones.
Finalmente, el tono de Sáenz resuena fuerte en medio de este vaivén político. Criticó al Gobierno, afirmando que la gente está enojada y sufre, con lo cual, es imperativo que se escuche ese mensaje. Sin embargo, los desafíos internos entre los gobernadores continúan, como se evidenció en Catamarca, donde se presentaron en apoyo a organismos nacionales desfinanciados.
La idea subyacente es clara: el peronismo debe permanecer unido para enfrentar los obstáculos venideros y generar un real impacto entre la ciudadanía.