En noviembre, envíos alcanzan mínimo histórico en 20 años

Mientras Diego Santilli, el ministro del Interior, recorre las provincias buscando el apoyo de los gobernadores para el Presupuesto 2026, su compañero en Economía, Luis Caputo, sigue adelante con los recortes de fondos. La situación se torna crítica, especialmente con los números que vienen del acumulado de este año.

En noviembre, las transferencias “discrecionales”, que son aquellas que no son automáticas y no forman parte de la coparticipación, experimentaron una bajada histórica. Se mandaron solo $2,2 billones, una cifra que se considera la segunda más baja desde 2005, según datos de la consultora Politikon Chaco. Esto indica que el Gobierno nacional está enfrentando la presión de cumplir con sus objetivos fiscales y necesita ajustar el gasto donde pueda, ya que Caputo tiene limitaciones por la fórmula de ajuste del sistema previsional, que está atada a la inflación.

Este recorte de gastos, especialmente en áreas donde se puede actuar, impacta directamente en las transferencias a las provincias. También hay focos de recorte en salarios, subsidios y en el gasto social. La meta que se ha propuesto el Ejecutivo es cerrar el año con un superávit del 1,3% del PBI. Aunque esto es 0,3 puntos inferior a lo acordado con el FMI, está dentro de los parámetros, dado que se mide en pesos y no en el ratio sobre el producto. La meta para diciembre asciende a alrededor de $10,4 billones, comparado con los $12 billones alcanzados en octubre.

El gasto recortable

En noviembre, las transferencias no automáticas del Estado Nacional hacia las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) redujeron su volumen un 32,3% en términos reales, siendo este el cuarto descenso consecutivo. Si se analiza a precios actuales, marcamos el peor noviembre desde 2005, con apenas $155.849 millones distribuidos.

El informe indica que “los fondos distribuidos en noviembre no solo fueron menores a los de igual mes del 2024, sino que son los más bajos desde 2005: se trata del peor noviembre en dos décadas”.

Menos plata para CABA

Uno de los aspectos que sorprende en los números de noviembre es cómo el Gobierno Nacional ha recortado fondos destinados a la Ciudad de Buenos Aires. Desde el año pasado, la capital logró una cautelar de la Corte Suprema en relación a la anulación de un decreto que Alberto Fernández emitió y que había cambiado la coparticipación, aumentando los fondos que recibía en ese momento el bastión electoral del PRO.

A pesar de esta situación, la cautelar resolvió que los fondos se enviaran a través de transferencias discrecionales. Jorge Macri, el jefe de Gobierno porteño, insiste en que se debería enviar el dinero diariamente, como ocurre con la coparticipación. Sin embargo, esta cautelar no es definitiva, lo que deja un manto de incertidumbre.

En noviembre, los envíos a la CABA cayeron un 64% en términos reales en comparación con el mismo período del 2024, totalizando apenas $48.627 millones.

Cuáles fueron los fondos que se remitieron

En noviembre, se destacaron varias actividades con un alto volumen de desembolsos, entre ellas:

  • Cumplimiento de la Medida Cautelar CSJN 1864/2022 por $40.000 millones (25,7% del total del mes, destinado únicamente a CABA).
  • Universalización de la Jornada Extendida por $22.212 millones (14,3% del total, destinado a dieciocho distritos).
  • Estímulo a la producción de Gas Natural por $18.266 millones (11,7% del total, a seis distritos).
  • Funcionamiento de Hospitales por $17.019 millones (10,9% del total, solo para Buenos Aires, CABA y Santa Cruz).
  • Transferencias a Cajas Previsionales Provinciales por $11.000 millones (7,1% del total, para Córdoba y Entre Ríos).
  • El resto de las actividades totalizaron $47.352 millones (30,4% del total).

Pasadas las elecciones, no hay ATN

Una de las situaciones más notorias de noviembre es la ausencia de Aportes del Tesoro Nacional (ATN). Estos fondos son los que se manejan con mayor discrecionalidad por el Poder Ejecutivo, y tras las elecciones, las ayudas cesaron.

Es relevante mencionar que desde 2026 los ATN estarán prácticamente eliminados. La oposición, con el apoyo de algunos gobernadores, aprobó una ley que establece que el dinero destinado a ATN será distribuido de forma automática.

Este fondo se financia con el 1% de la recaudación. Se prevé que la recaudación de impuestos de este año alcance alrededor de $200 billones, lo que significa que el fondo podría ser de unos $2 billones anuales en moneda actual.

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