El Vaticano se Prepara para la Primera Votación del Cónclave
La espera para el Vaticano ha terminado. Este miércoles, a las 11:30 (hora argentina), 133 cardenales ingresarán a la Capilla Sixtina para dar inicio al Cónclave 2025, donde se definirá al sucesor del papa Francisco.
Esta será la elección papal más internacional desde el pontificado de Francisco, con la participación de 107 cardenales habilitados para votar, muchos de ellos de países periféricos. Los purpurados podrán votar hasta cuatro veces al día y, si no se llega a un acuerdo, la votación continuará el jueves.

Cónclave 2025: Proceso de Elección
Después de la misa tradicional previa a la elección, los cardenales ingresarán a la Capilla Sixtina, donde quedarán incomunicados con el mundo exterior. El secretario de Estado, Pietro Parolin, presidirá el evento. Cada purpurado recibirá una papeleta en blanco y escribirá un solo nombre bajo la frase eligo in Summum Pontificem. Luego, deberán depositar su voto en una urna tras jurar: Invoco a Cristo el Señor, que me ha de juzgar, por testigo de que mi voto se da al que, según Dios, creo que debe ser elegido.
Las papeletas serán contadas por tres responsables. Si el número de papeletas no coincide con el de votantes, se destruyen y se repite la votación. Si hay coincidencia, se leerán en voz alta. En caso de no alcanzar el mínimo requerido de 89 votos, se quemarán las papeletas, produciendo humo negro que indicará a los fieles que no hay nuevo Papa. Si se logra elegir a un nuevo Sumo Pontífice, el humo será blanco, anunciando el fin del Cónclave.
Una vez alcanzado el quórum, el elegido deberá aceptar su designación y escoger un nombre que lo represente. Posteriormente, la Iglesia Católica anunciará al nuevo Papa con el tradicional Habemus Papam desde la Logia de la Basílica de San Pedro.
La Misa Pro Eligendo Pontífice
Antes del inicio del Cónclave, alrededor de 5.000 personas asistieron a la misa Pro eligendo pontifice en la basílica de San Pedro, encabezada por el cardenal decano Giovanni Battista Re. La ceremonia congregó a más de 200 figuras del clero, incluyendo cardenales, obispos y religiosos.
A pesar de las condiciones climáticas adversas y el acceso restringido, la participación fue significativa. La seguridad fue una prioridad, con controles policiales para acceder a la plaza, mientras que cientos de periodistas cubrieron el evento desde la plaza Pío XII y otras estructuras habilitadas.
La partida de Francisco deja un vacío difícil de llenar, no solo por su fuerte liderazgo, sino también por la reestructuración que realizó en los balances cardenalicios. Este Cónclave se presenta como el más internacional hasta el momento, con cardenales de 70 países, lo que refleja la diversidad de la Iglesia Católica en la actualidad.