el teléfono de un empresario que la justicia no logró incautar
Sergio Mastropietro, un empresario del sector de la aviación, se ha visto envuelto en un escándalo relacionado con la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), señalado por la fiscalía como un posible eslabón en un caso de corrupción. Lo curioso es que logró evitar el secuestro de su teléfono celular, que desapareció durante un procedimiento de las autoridades nacionales.
El fiscal Franco Picardi ha descrito a Mastropietro como el operador financiero de Miguel Ángel Calvete, otro empresario involucrado en este entramado. Según se investiga, Calvete habría creado un circuito ilícito para direccionar contrataciones y captar dinero de las droguerías que proveen a la ANDIS.
En el marco de las maniobras de lavado de activos, luego de mencionar el nombre de Mastropietro, el fiscal apuntó a una empresa de aviación que, al parecer, emitió facturas por la “compra de kilómetros”. Esta práctica se está revisando de cerca, ya que podría ser parte de un intento de encubrir el verdadero origen del dinero.
El secuestro que no fue
El 15 de noviembre, Mastropietro regresaba de Miami en un avión privado y, antes de llegar al Aeroparque Jorge Newbery de Buenos Aires, hizo una parada en Tucumán que, se dice, fue para reabastecer combustible. A su llegada, los agentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y de Migraciones estaban listos para proceder con el secuestro de su teléfono, pero no ocurrió.
Al poco tiempo, las autoridades llevaron a cabo una orden judicial que terminó en el allanamiento de su domicilio, donde se requisaron las computadoras de Mastropietro. Sin embargo, él alegó que no tenía el celular consigo en ese momento.
Por ahora, el fiscal no ha solicitado una indagatoria para Mastropietro, pero no se descarta que esto cambie, ya que se considera una pieza clave en la causa. Aunque su nombre no figura en la primera lista de indagatorias, ha sido mencionado en varios tramos del dictamen presentado al juez Sebastián Casanello en relación a las supuestas maniobras de lavado.
Las evidencias indican que Calvete y Diego Orlando Spagnuolo podrían tener, al menos, una relación comercial con Mastropietro. Este último está vinculado con Baires Fly S.A., una firma de aviación privada que ofrece servicios de vuelos las 24 horas, como se detalla en sus redes sociales.
Además, se ha determinado que en agosto pasado, Mastropietro envió a Calvete información de una cuenta bancaria a nombre de Baires Fly S.A. Dicha empresa emitió facturas por la supuesta “compra de kilómetros”, un tema que ha levantado sospechas sobre la posible intención de ocultar el verdadero destino del dinero.