El presupuesto 2026 no contempla aumentos adicionales en gasto
En el proyecto de Presupuesto 2026, que el Gobierno presentó al Congreso recientemente, se anticipa un pequeño aumento en los recursos para jubilados y pensionados. Pero, ojo, este incremento no está garantizado: depende de que se cumplan las metas de inflación establecidas. Además, el proyecto no incluye ni un aumento del bono actual ni ninguna recomposición fuera de la fórmula de indexación de los haberes. Por si fuera poco, se planea una fuerte reducción en las partidas para el pago de deudas previsionales.
Según un análisis del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), el gasto destinado a las Prestaciones de la Seguridad Social en este presupuesto representa un incremento real del 5,4% en comparación con este año. Este gasto abarca las transferencias para jubilaciones y pensiones, tanto contributivas como no contributivas. Sin embargo, es importante destacar que no incluye el bono de refuerzo que muchos jubilados esperan.
El documento de casi 7.000 páginas no menciona incrementos en jubilaciones y pensiones más allá del esquema de movilidad actual, que se basa en el último dato de inflación. Esto significa que el bono de hasta $70.000 que se mantiene sin variaciones desde marzo pasado también queda fuera de esta discusión.
Los números también son reveladores. El gasto en Prestaciones de la Seguridad Social apenas variará respecto a lo que se proyectó para este año. Si miramos más de cerca, el envío de recursos para este sector representará el 6,37% del Producto Bruto Interno en 2025, mientras que para el año siguiente se prevé un leve aumento al 6,5%. Esto muestra una diferencia mínima de solo 0,13 puntos del PBI.
El aumento jubilatorio atado a la baja de la inflación
En cuanto a la movilidad, a partir de abril de 2024, se estableció una nueva fórmula que promete actualizar los haberes previsionales mensualmente según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicado por el INDEC. Esta fórmula busca ayudar a que los jubilados y pensionados mantengan sus ingresos a pesar del tiempo.
Vale la pena mencionar que, dado que esta fórmula ajusta los haberes con un rezago de dos meses, si la inflación baja como lo prevé el Presupuesto (10,1% anual para 2026), habrá un rezago positivo en la actualización. Sin embargo, si la inflación se mantiene alta, los ajustes de los meses anteriores podrían resultarle desfavorables a los jubilados.
Presupuesto 2026: se reduce la partida para pagar sentencias
En el presupuesto también se plantea un envío de $212.288 millones para cancelar deudas previsionales reconocidas judicialmente. Esta cifra representa una notable reducción respecto a lo que se había propuesto el año pasado, que era de $390.050 millones. Esto se traduce en un recorte del 45,57% en términos nominales, lo que podría impactar negativamente en muchos jubilados que esperan el cumplimiento de estas deudas.
Así, el panorama para los jubilados y pensionados en el próximo presupuesto presenta más interrogantes que certezas, y es fundamental estar atentos a lo que ocurra en las próximas discusiones.