Se avecinan horas decisivas para el Partido Justicialista (PJ), que se prepara para una marcha masiva en apoyo a Cristina Kirchner. La reunión, programada para esta tarde a las 18:00, contará con la presencia de seis gobernadores, quienes se reunirán para establecer la logística del evento que llevará a la expresidenta a los tribunales de Comodoro Py.
Durante este encuentro, se abordarán temas críticos como el recorrido de la marcha y la ubicación del vehículo que trasladará a Cristina. Además, se discutirá la posibilidad de que la justicia notifique de manera anticipada a la expresidenta sobre su detención, lo que podría desactivar la movilización programada para el jueves bajo el lema Argentina con Cristina.
Detalles de la reunión y la marcha
El local del PJ en la calle Matheu se ha convertido en un centro de actividad política intensa. La jornada se ha visto marcada por el pedido de los fiscales federales, Diego Luciani y Sergio Mola, para rechazar la solicitud de prisión domiciliaria de Cristina. Este pedido, que se espera será denegado por el TOF número 2, se suma a una presentación de la Procuración General de la Ciudad de Buenos Aires, que solicita que la expresidenta cumpla su prisión domiciliaria fuera de la capital federal, debido a la problemática de seguridad que podría acarrear la vigilia permanente frente a su hogar.
El TOF podría notificar a Cristina de manera remota sobre el cumplimiento de su prisión domiciliaria, lo que se interpretaría como una maniobra para intentar evitar la marcha programada para mañana a las 10:00 desde Constitución hasta los tribunales. Sin embargo, desde el Consejo Nacional del PJ se minimiza esta posibilidad, afirmando que la justicia no querría perder la oportunidad de captar la imagen de Cristina llegando a los tribunales.
Reuniones y apoyos políticos
El clima en el PJ es de alta tensión, con reuniones programadas con la cúpula de la CGT y más tarde con gobernadores y legisladores. La presencia de gobernadores como Axel Kicillof (Buenos Aires) y Ricardo Quintela (La Rioja) ha sido confirmada, mientras que otros mandatarios se unirán de forma remota. Sin embargo, algunos, como Gustavo Saénz (Salta), han sido excluidos debido a su cercanía con la oposición y su colaboración con La Libertad Avanza.
La marcha en apoyo a Cristina ha desatado tensiones entre el Poder Ejecutivo y el sistema judicial. Mientras los fiscales buscan la imagen de la expresidenta en tribunales, el Gobierno prefiere que la notificación se realice de manera remota para evitar un despliegue masivo en la calle. Este conflicto refleja la pérdida de control del Gobierno sobre la agenda política, a medida que surgen otros temas relevantes como la inflación y la gira internacional de Javier Milei.
La situación ha llevado a que se establezcan directivas claras desde la Casa Rosada para evitar cualquier actuación que pueda resultar humillante para Cristina, como esposarla o imponerle medidas de seguridad excesivas.
La movilización en apoyo a Cristina no solo es un evento político, sino también una manifestación de la lucha por el control narrativo y la imagen pública de la expresidenta en un contexto de creciente tensión política y judicial.
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