El peso argentino cae 30% ante el dólar por incertidumbre electoral
A lo largo de 2025, el peso argentino vivió una caída significativa frente al dólar, marcando un récord negativo en todo el mundo. Según un análisis de Bloomberg, que examinó 145 monedas, la devaluación del peso alcanzó un impactante 30,59%. Esta situación es aún más notable ya que superó a monedas de otros países que también están atravesando crisis económicas.
En la lista de monedas que sufrieron caídas, encontramos a la lira turca, el birr etíope y el dinar libio, pero ninguna se acerca a lo que pasó con nuestra moneda. En la región, otras divisas emergentes, como el dólar surinamés, el peso dominicano y el tugrik mongol, también retrocedieron, aunque en menor medida. De las 145 divisas analizadas, solo 25 lograron apreciarse frente al dólar en el mismo período.
El comportamiento del peso es un reflejo claro de la volatilidad del mercado local, afectado por la incertidumbre política y económica que precede a las elecciones de medio término. Expertos y bancos de inversión coinciden en que las expectativas sobre posibles cambios en la economía y los resultados de las elecciones están influyendo de manera decisiva en la dinámica de los precios.
En el ámbito financiero, el índice S&P Merval, medido en pesos, se mantuvo cerca de los 2 millones de puntos. Aunque en dólares recuperó terreno después de las elecciones legislativas de septiembre, todavía está un 7% por debajo de los niveles que se registraban antes de esos comicios.
Dólar: los tres escenarios que maneja la city para la divisa tras las elecciones 2025
Consultado por Ámbito, el economista Jorge Neyro expuso varias proyecciones para el dólar según los posibles resultados electorales. Mencionó un escenario favorable para el Gobierno, uno neutro y otro adverso. Neyro indica que, si hay una ruptura de las bandas cambiarias, eso podría ser señal de un resultado electoral muy negativo. En cambio, el mantenimiento del régimen actual estaría relacionado con un resultado positivo.
Sin embargo, el pronóstico más probable, según el economista, es un escenario intermedio. Esto implicaría que el esquema de bandas se mantendría, pero con un ajuste en los límites superior e inferior. Según Neyro, “la flotación podría ser positiva, pero es probable que el Gobierno busque evitar la volatilidad inmediata”.
Neyro destaca que cualquier nuevo sistema deberá alinearse con la acumulación de reservas, una de las exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Recientemente, el banco de inversiones Morgan Stanley presentó tres escenarios posibles para el dólar. Primero, si el Gobierno obtiene un resultado sólido en las elecciones (superando el 35% de los votos), la entidad ve condiciones para una flotación cambiaria coordinada con el respaldo de los EEUU. En este caso, el dólar se estabilizaría alrededor de los $1.700 para fin de año.
En un segundo escenario, si la elección es pareja, con La Libertad Avanza logrando entre 30% y 35% de los votos, el banco prevé que el tipo de cambio podría oscilar entre los $1.800 y $2.000. Por último, si el oficialismo no supera el 30%, el dólar podría sobrepasar los $2.000.
Por su parte, el economista Amílcar Collante anticipa que el oficialismo alcanzará apenas un poco más del 30% de los votos, lo que podría llevar a la eliminación de las bandas cambiarias y a una flotación un poco más libre, con cierto margen para intervenciones. Sin embargo, cree que las transiciones se darán de manera progresiva, no necesariamente al día siguiente de las elecciones.
Desde la sociedad de bolsa Balanz, opinan que el escenario más probable luego de las elecciones será uno de flexibilización del esquema cambiario y monetario. Comentan que ahora la cuestión es si las bandas se ampliarán en el tiempo o si se avanzará hacia un régimen de flotación administrada, a la vez que surgen dudas sobre si el apoyo de EEUU se mantendrá independientemente del resultado electoral.