En medio de la creciente tensión comercial, el analista Salvador Di Stefano, conocido como el gurú del blue, sugiere que los aranceles impuestos por el gobierno de Donald Trump podrían presentar una oportunidad para los activos de riesgo argentinos. A medida que se implementan aranceles recíprocos sobre las importaciones a Estados Unidos, Di Stefano destaca que estos cambios podrían beneficiar a algunos sectores económicos en Argentina, especialmente gracias a los acuerdos en los que trabaja el Gobierno.
La guerra comercial ha creado un nuevo escenario en el comercio internacional. Los aranceles han levantado una muralla de tarifas entre la economía estadounidense y el resto del mundo, lo que ha generado un impacto significativo en las dinámicas de importación y exportación. Por ejemplo, los aranceles diferenciales permiten que algunos países, como Brasil, obtengan ventajas competitivas sobre otros, como Vietnam, en la exportación de productos similares.
La estrategia de negociación de Trump
La forma en que opera Donald Trump en las negociaciones es bastante clara: comienza atacando, luego niega y finalmente busca un acuerdo que presente como una victoria. Este enfoque ha llevado a que Estados Unidos esté abierto a renegociar aranceles, siempre que se logren concesiones en otras áreas. Este reseteo en el comercio mundial plantea la pregunta de cómo se formarán nuevas alianzas entre países, y cuáles serán las respuestas de cada nación ante esta nueva realidad comercial.
Por otro lado, el impacto de los aranceles en la economía estadounidense podría resultar en un aumento de la inflación, lo que complicaría las decisiones de la Reserva Federal sobre las tasas de interés a corto plazo. En este contexto, se espera que los bonos del Tesoro de Estados Unidos muestren un aumento, ya que los inversores buscan refugio en activos más seguros.
Oportunidades para Argentina
Argentina, que actualmente enfrenta un arancel del 10%, tiene la posibilidad de negociar una reducción a 0%. Esta situación se presenta como una gran oportunidad para el país, especialmente en el sector de las materias primas. Sin embargo, la caída del precio del petróleo a u$s66 plantea desafíos, aunque se mantiene la esperanza de que los precios se recuperen debido a los altos costos de extracción en Estados Unidos, el principal productor mundial.
A pesar de los desafíos, las acciones argentinas en el sector energético, como YPF y Vista, han mostrado un rendimiento interesante. Ambas empresas están en medio de inversiones para mejorar su capacidad de producción y distribución, lo que podría llevar a un aumento en sus ingresos a largo plazo.
El camino hacia un acuerdo comercial
Argentina se encuentra en la antesala de un acuerdo comercial con Estados Unidos y el FMI, que podría traer consigo un flujo significativo de capital para fortalecer el Banco Central. Esto ayudaría a estabilizar el valor del dólar y podría contribuir a una disminución de la inflación. La recaudación fiscal ha mostrado un incremento del 7,2% en términos reales, lo que es un indicador positivo en medio de un entorno económico incierto.
Para aquellos que han invertido en pesos, las perspectivas son alentadoras, con un dólar estabilizado en la zona de $1.300. La tasa en pesos de instrumentos como Lecap y Boncap ha comenzado a disminuir, lo que sugiere un entorno favorable para los inversores. A medida que se acercan las elecciones legislativas en octubre, la expectativa es que las acciones comiencen a recuperarse.
En este contexto, hay más posibilidades de ganar que de perder. La clave está en comprar cuando los mercados están a la baja y vender cuando están en alza. Mantente informado sobre las tendencias del mercado y aprovecha las oportunidades que surgen en este entorno cambiante.
