El Gobierno reduce a la mitad los fondos para damnificados
El Ministerio de Economía ha realizado ajustes en el presupuesto, lo que ha generado movimiento y discusión en varios sectores. Publicaron la reasignación de unos $100.000 millones de un “fondo especial de asistencia para emergencias”, lo que es bastante significativo.
Con el anuncio del Presupuesto 2026, todos están expectantes, ya que esta será una oportunidad para devolver la previsibilidad necesaria en los financiamientos a distintas áreas. La expectativa crece tras la reducción de gastos, que se alinean con lo mencionado por el Ministerio de Economía: esas “reasignaciones de partidas con una baja en el gasto primario”.
El 7 de septiembre, mediante la decisión administrativa 23/25, se comunicó un incremento en partidas por $261.613 millones, mientras que se decretó una reducción de $493.531 millones. Uno de los fondos que experimenta este recorte es el mencionado “fondo especial de asistencia”, que se estableció tras el temporal que afectó a Bahía Blanca en marzo.
Cuando se creó este fondo, a través del decreto 238/25, el Gobierno había estipulado una suma de hasta $200.000 millones para subsidios a los residentes de las viviendas afectadas. Sin embargo, con el último ajuste, se le quitó $100.000 millones a esa cifra.
También se debe mencionar que esta decisión se produce en el marco de otras medidas, como el veto de Javier Milei en junio respecto a la declaración de emergencia en Bahía Blanca. Este veto significó que no se volviera a tratar una ley aprobada por el Congreso que preveía financiamiento por al menos $200.000 millones para ayudar a los damnificados y mejorar infraestructuras.
Educación, uno de los sectores más golpeados
Dentro de este ajuste, un área crítica que recibió un fuerte recorte es Educación, contemplando una reducción de $120.000 millones. Esto impacta directamente en becas para estudiantes, infraestructura y desarrollo de la educación superior. Esta medida aparece justo después de que el presidente Milei vetara una ley que incrementaba el gasto en universidades.
Parece que el panorama es complicado. El superávit presupuestario se ha movido de $5,9 billones a $6,6 billones, representando el 5% de los recursos proyectados. De acuerdo con reportes recientes, el Gobierno ha aumentado el gasto en 76 programas por un total de $459.673 millones y, a la vez, ha recortado recursos en 111 programas por $953.024 millones.
Así, el Poder Ejecutivo sigue manejándose con un presupuesto prorrogado del 2023, extendido en 2024 y 2025. Actualmente, se estiman gastos de casi $126 billones y recursos por $131,8 billones. Hasta el 9 de septiembre, el nivel de ejecución del gasto estaba en el 62%, mientras que los ingresos alcanzaban el 71% de lo previsto.
Con estos ajustes, los Gastos Corrientes disminuirán en $270.854 millones y los Gastos de Capital en $222.677 millones. Los detalles son los siguientes: en Gastos Corrientes, las transferencias caerán en $327.563 millones, mientras que el gasto en personal también se recortará en $67.523 millones. Por otro lado, algunos servicios y bienes de consumo mostrarán incrementos.
El panorama es incierto, pero claro, cada ajuste trae consigo consecuencias que atañen a diversos segmentos de la sociedad.