El CEO de OpenAI detalla el consumo energético de ChatGPT
¿Te pusiste a pensar cuántas veces interactuamos con la inteligencia artificial a diario? Cada mensaje que enviamos a sistemas como ChatGPT tiene un costo energético que, aunque parezca pequeño, se suma a una cifra enorme. Es fascinante, ¿no?
Sam Altman, el CEO de OpenAI, compartió que cada vez que haces una consulta a ChatGPT, se requieren 0,34 vatios-hora de energía. Para que lo visualices mejor, eso sería como usar un horno por un segundo o tener una lámpara encendida durante unos minutos. Suena poco, pero imagina las miles de millones de interacciones que se dan a nivel mundial cada día.
Costo energético de la inteligencia artificial
La idea es reducir la energía que consume cada consulta y mejorar la eficiencia del hardware y de los centros de datos. Altman menciona que este no es un tema exclusivo de OpenAI. La inteligencia artificial está cada vez más presente en el día a día, por lo que entender su costo energético se vuelve crucial. Esto nos ayuda a anticipar cómo evolucionará la tecnología y qué se necesita para disminuir su impacto en el medio ambiente.
Interacciones masivas
Por si no lo sabías, ChatGPT procesa unos 2.500 millones de solicitudes por día. Esto pone en claro por qué los gastos de energía y la infraestructura necesaria son temas tan centrales en la industria tech. Además, Altman destacó un dato curioso: cada consulta consume 0,00032176 litros de agua para enfriar los centros de datos. Aunque individualmente suene poco, al multiplicarlo por miles de millones, ¡la cifra es abrumadora!
Innovaciones necesarias
El gran desafío ahora es crear modelos más eficientes y centros de datos que reduzcan la demanda de electricidad y optimicen la refrigeración. Altman subraya que la sostenibilidad será clave para el futuro de la inteligencia artificial, ya sea en el trabajo, la educación o en servicios que usamos cotidianamente.
El costo energético y sus implicaciones nos invitan a reflexionar sobre el uso que hacemos de esta tecnología y su impacto en el mundo. ¡Interesante, ¿verdad?!