Depósitos privados en dólares cayeron en agosto: análisis preelectoral
A pesar de que el Banco Central (BCRA) ha mencionado que, desde que se flexibilizó el cepo cambiario para personas y familias, parte de los dólares solicitados por la gente terminan en el sistema financiero y son utilizados para gastos en el exterior, los datos parecen contar otra historia, al menos lo que ha sucedido en agosto.
Aunque todavía no tenemos la cifra exacta del atesoramiento de agosto, ya se conoció el número de julio, que superó los u$s5.400 millones. Las estadísticas del BCRA indican que, al 28 de agosto, el stock de depósitos en dólares (los conocidos argendólares) cayó en más de u$s316 millones. Es solo una merma de casi un 1%, que puede parecer poco, pero es un indicativo de algo más. Esta disminución interrumpe una tendencia de crecimiento que se había retomado en abril, en un contexto preelectoral bastante convulso.
Los datos oficiales aseguran que, al final de agosto, el stock de argendólares se situó en u$s32.267 millones, aunque, para el acumulado del 2025, aún se sostiene un saldo positivo de aproximadamente u$s824 millones.
Del blanqueo al presente
Desde noviembre del año pasado, la salida de argendólares fue notoriamente consistente hasta marzo. Para poner en contexto, el stock de argendólares había crecido considerablemente gracias al blanqueo de capitales. Según el BCRA, con el “Régimen de Regularización de Activos”, los argendólares aumentaron más de u$s12.000 millones en septiembre de 2024 y, después de una prórroga, otros u$s3.200 millones.
El interés fue tal que, hacia finales de septiembre, los depósitos en dólares superaron los u$s1.000 millones diarios. En ese entonces, el stock de argendólares alcanzó cerca de u$s31.500 millones, un nivel similar al máximo que se vio en 2019.
Sin embargo, desde noviembre de 2024, hubo una marcada salida de más de u$s2.000 millones y otros u$s1.100 millones en diciembre, lo que hizo que el stock retrocediera a los niveles de fines de septiembre. Desde entonces, continuaron cayendo con altibajos: u$s2.340 millones en enero, u$s860 millones en febrero y u$s1.000 millones en marzo. En abril, en medio de una flexibilización del cepo para individuos y familias, se vio un resurgimiento en el atesoramiento con más de u$s2.000 millones, recuperando apenas lo que se perdió el mes anterior.
En mayo, el stock creció apenas u$s39 millones, mientras que en junio el aumento fue de u$s440 millones. Ya en julio, con un monto de atesoramiento que superó los u$s5.430 millones, el stock de argendólares subió casi u$s1.740 millones.
Ahora, según lo que se ha visto en agosto, aunque aún no se cuenta con el dato del atesoramiento, el stock de argendólares está cerrando el mes alrededor de u$s32.260 millones, en medio de un clima financiero y cambiario complicado.
Lo interesante es que, por el momento, parece que la mayoría de los titulares de argendólares están manteniendo sus posiciones. De hecho, de los depósitos en dólares, hay aproximadamente 135 millones en cuentas a la vista, de los cuales unos 11 millones superan el millón de dólares. Además, hay alrededor de 6.765 millones en depósitos a plazo fijo, y unos 2.589 millones corresponden a colocaciones de más de un millón de dólares.
Es importante mencionar que la mayor parte de estos argendólares están en depósitos en caja de ahorro, sumando unos u$s25.000 millones. Estos depósitos han sido una especie de refugio seguro, más allá de la depreciación del dólar, y se pueden usar de manera inmediata, a menos que llegue un gran imprevisto.
Vale la pena recordar que los encajes de los argendólares están registrados dentro del stock de las reservas brutas del BCRA, lo que significa que cualquier movimiento, ya sea positivo o negativo, puede afectar directamente las divisas del banco.
Si se confirma que en agosto solo se fueron menos del 1% de los argendólares, no debería generar alarma. Pero en un contexto donde se intensifican los ruidos políticos y los escándalos preelectorales, habrá que estar atentos a cómo reaccionan los titulares de esos dólares, especialmente de cara a octubre. Además, hay que tener en cuenta que estos argendólares son esenciales para el financiamiento en dólares a nivel local, para empresas exportadoras y otras vinculadas, por lo que una restricción en el stock de depósitos podría afectar la capacidad de crédito en el país.