Crisis por la Crecida del Río Bermejo en Salta y Chaco
La crecida del río Bermejo está causando estragos en el norte de Salta y en Chaco, afectando a numerosas familias y comunidades. Con caminos intransitables y viviendas inundadas, la situación es crítica. Las autoridades locales están trabajando arduamente para brindar asistencia a quienes se encuentran aislados.
Más de 600 familias en Salta han sido impactadas, y muchas localidades han quedado incomunicadas, sin acceso a servicios esenciales como electricidad y agua potable. Este panorama alarmante ha llevado a las autoridades a emitir advertencias sobre el riesgo de enfermedades debido al agua estancada.

Impacto de la Crecida en la Región
La reciente crecida del río Pilcomayo ha exacerbado la situación, obligando a evacuar a más de 500 personas y dejando a unas 15 comunidades completamente aisladas. Algunas viviendas han colapsado, y el suministro de servicios básicos se ha visto severamente interrumpido.
Las localidades más perjudicadas incluyen Las Vertientes, Larguero y El Chañaral, donde el agua ha rodeado los asentamientos. La empresa estatal SAMEEP en Chaco está trabajando para garantizar la potabilización del agua en medio de esta crisis, implementando medidas de emergencia para asegurar el abastecimiento.
Estado de los Ríos y Situación en las Comunidades Afectadas
A pesar de que la Comisión Regional del Bermejo (COREBE) ha informado que los niveles del agua han comenzado a descender en algunas áreas, la cuenca del río San Francisco sigue en alerta, con un caudal que continúa aumentando. En Rivadavia Banda Norte, el agua ha rodeado la localidad, aunque no se han reportado evacuados hasta el momento.
Las comunidades wichí, como La Esperanza y San Felipe, enfrentan serias dificultades para acceder a alimentos y asistencia. El intendente de Morillo, Marcelo Córdova, ha expresado su preocupación por el estado de los caminos, lo que complica aún más la llegada de ayuda.
El Impacto de la Crecida del Pilcomayo
El río Pilcomayo ha alcanzado niveles históricos, provocando un aislamiento generalizado de las comunidades. El punto más crítico se registró el 18 de marzo, con un caudal de 7,14 metros. La situación en La Gracia es particularmente grave, con caminos y viviendas bajo el agua.
La falta de alimentos y agua potable en localidades como Santa Victoria Este y Misión La Paz agrava la crisis. Con la ruta 54 cortada, las autoridades están utilizando lanchas para realizar operativos de rescate y distribución de ayuda.
Las autoridades sanitarias han emitido alertas sobre el riesgo de enfermedades transmitidas por el agua, como el dengue y la leptospirosis. Para mitigar estos riesgos, se han desplegado equipos de salud en las zonas afectadas, proporcionando atención médica y distribuyendo insumos necesarios.
Las comunidades damnificadas esperan que las acciones de asistencia se intensifiquen en los próximos días, mientras la situación sigue siendo incierta y la necesidad de ayuda es urgente.
Es fundamental que todos estemos atentos a la evolución de esta crisis y apoyemos a quienes más lo necesitan. Te invitamos a seguir informado sobre las acciones que se están llevando a cabo y a considerar cómo puedes contribuir a la recuperación de estas comunidades afectadas.