Conmoción en Mendoza: hallan sin vida a la exfiscal Anabel Orozco
La exfiscal Anabel Matilde Orozco fue encontrada muerta en su vivienda del barrio privado Dalvian, en Mendoza. Su cuerpo fue hallado el pasado martes y presentaba un golpe en la cabeza, lo que llevó a la Justicia a iniciar una investigación de inmediato. Orozco, de 73 años, había sido apartada de su cargo en 2017 tras un escándalo que le valió el apodo de la fiscal viajera.
En un primer momento, se activó el protocolo correspondiente a un posible femicidio debido a la lesión en su cráneo. Sin embargo, los peritajes posteriores determinaron que la causa de muerte fue natural, atribuyéndola a un desmayo que resultó fatal tras la caída.

Detalles de la investigación
En la escena del hecho no se encontraron indicios de violencia ni de intervención de terceros, lo que llevó a descartar la posibilidad de un homicidio en ocasión de robo. El motivo del deceso responde a causas naturales. No se evidencian pruebas que indiquen la participación de terceros en el hecho, declararon desde la Unidad Fiscal de Homicidios y Violencia Institucional. La causa está a cargo del fiscal Carlos Torres, quien espera los resultados finales de las pericias para definir los pasos a seguir en la investigación.
Un escándalo que marcó su carrera
Entre 2016 y 2017, Orozco protagonizó un escándalo que culminó en su destitución del Poder Judicial por desorden de conducta. En noviembre de 2016, solicitó una licencia médica alegando lumbalgia, pero viajó a Florianópolis, Brasil, con amigas y participó en un torneo de bridge en Potreros de los Funes, San Luis, publicando fotos de su viaje en redes sociales.
A principios de 2017, fue suspendida de su cargo y su salario se redujo a la mitad mientras se resolvía su situación. En octubre de ese año, un tribunal decidió su destitución definitiva por fraude a la administración pública, con 17 votos a favor y 4 en contra.
Defensa de su conducta
Orozco defendió su actuación alegando que su viaje era parte de un tratamiento por depresión y angustia tras enviudar y enfrentar un cáncer de mama. En su alegato, mencionó que sus amigos le brindaron alegría y que no había nada inmoral en las fotos compartidas. También se quejó de las críticas mediáticas y políticas, afirmando que el propio gobernador pidió un castigo ejemplificador.
Después de 25 años en la Segunda Fiscalía Correccional de Mendoza, Orozco perdió su cargo y quedó fuera del sistema judicial. En su declaración final, expresó sentirse sola; mujer; enferma; sin contactos políticos ni tratos o favores que ofrecer a cambio de la justicia que merezco, denunciando la presión ejercida por las autoridades provinciales.
La muerte de Anabel Matilde Orozco ha conmocionado a Mendoza y reavivado discusiones sobre su legado en el sistema judicial, así como la controversia que marcó su carrera. Su historia es un recordatorio de las complejidades que enfrentan los funcionarios en el ejercicio de sus funciones y las consecuencias de sus decisiones personales.