Cómo proteger tus datos de las conversaciones en Google con ChatGPT

Desde hace un tiempo, la Inteligencia Artificial (IA) se ha vuelto parte de nuestra vida diaria. Uno de los ejemplos más claros es ChatGPT, el chatbot que usan millones de personas en todo el mundo. La gente recurre a él para redactar textos, hacer traducciones, preparar clases, escribir código y hasta resolver preguntas personales.

Sin embargo, en los últimos meses, un tema ha generado cierta inquietud: algunos chats podrían aparecer en Google. Henk Van Ess, un investigador de la Universidad de Arizona, detectó que miles de conversaciones compartidas por usuarios de OpenAI eran accesibles en los resultados de búsqueda.

No se trató de un hackeo ni de una falla de seguridad en los servidores, sino de la función “Compartir chat”, que genera enlaces públicos que cualquiera puede ver, incluso si no tiene una cuenta en la plataforma. A continuación, nos metemos de lleno en los detalles.

¿Por qué tus chats de ChatGPT pueden aparecer en Google?

El tema comienza con una herramienta creada para facilitar la colaboración. Al usar la opción “Compartir chat”, ChatGPT genera un enlace único que se puede enviar a otra persona. Pero lo que muchos no sabían es que estos links son públicos por defecto. Esto quiere decir que los motores de búsqueda como Google pueden rastrearlos e indexarlos, igual que cualquier otra página web.

¿Y qué implica esto? Si alguien decide compartir ese enlace en una red social o en un correo, la conversación pasa a formar parte del vasto ecosistema de Internet. A partir de ese momento, cualquier usuario que busque ciertas palabras o frases podría encontrarla en los resultados de búsqueda, sin necesidad de permisos especiales.

Medidas para proteger tus conversaciones y mantener tus datos seguros

Aunque OpenAI ya tomó medidas, como desactivar la función de “Compartir chat” y pedir la eliminación de los enlaces problemáticos, los especialistas aconsejan tomar algunas precauciones.

Lo primero es evitar compartir enlaces públicos generados por ChatGPT. Si querés mostrar una conversación, lo mejor es hacer una captura de pantalla o copiar el texto manualmente, pero siempre evitando revelar información personal o laboral.

También es recomendable revisar el historial de chats. Si alguno de ellos aparece marcado como “Compartido”, podés ingresar a la conversación y revocar el acceso público desde la misma plataforma.

Una medida adicional es limitar la información que compartís en cada conversación. Recuerda que la IA no es un entorno privado: todo lo que escribas puede ser analizado para mejorar el sistema y, en algunos casos, puede ser accesible por requerimientos legales. Por eso, es mejor no incluir nombres completos, números de teléfono, direcciones, contraseñas o cualquier dato sensible.

Sam Altman, el CEO de OpenAI, reconoció en un podcast que las conversaciones con el asistente no garantizan privacidad absoluta. Además, confesó que todavía no hay marcos legales claros que regulen la confidencialidad entre usuarios y sistemas de IA.

Botão Voltar ao topo