Cirugía Histórica en el Hospital Garrahan: Éxito en Separación de Siamesas
Un equipo médico del Hospital Garrahan ha realizado una compleja cirugía para separar a dos gemelas siamesas que nacieron en abril en Rosario. Las pequeñas, unidas por el abdomen y parte del esternón, compartían el hígado, lo que representaba un gran desafío quirúrgico. Este procedimiento se llevó a cabo después de tres meses de preparación, donde se formó un equipo multidisciplinario para garantizar el éxito de la operación.
Los padres de las gemelas conocían su condición desde los primeros meses de embarazo y se prepararon para enfrentar el proceso médico. Al nacer, cada niña pesó 1.800 gramos en el Hospital Argerich, y posteriormente fueron trasladadas al Garrahan para recibir la atención necesaria.
Un Proceso Planificado con Detalle
El caso de las gemelas es poco frecuente, pero el hospital cuenta con experiencia en intervenciones similares y tiene un alto índice de éxito. Durante la planificación, los especialistas analizaron imágenes y realizaron simulaciones para asegurar que la separación se llevara a cabo de manera segura.
El jefe del quirófano, Mariano Boglione, explicó que la probabilidad de supervivencia era alta debido a que cada niña tenía su propio hígado funcional. Nacieron unidas por este órgano y parte del esternón, pero los especialistas lograron seccionar para que ambas tuvieran el suyo funcionando correctamente, señaló.
La intervención fue liderada por el doctor Víctor Ayarzábal y requirió la participación coordinada de cirujanos, anestesiólogos y especialistas en terapia intensiva. Tras la cirugía, las bebés se encuentran en la unidad de terapia intensiva neonatal del Garrahan, donde han sido retiradas de la asistencia respiratoria mecánica y evolucionan favorablemente. Una vez que superen la etapa de monitoreo y puedan alimentarse de forma natural, recibirán el alta para regresar a Rosario junto a su familia.
La Relevancia de la Intervención
Este exitoso procedimiento no solo representa un avance significativo en la medicina pediátrica, sino que también destaca la capacidad del Hospital Garrahan para llevar a cabo cirugías complejas. La intervención de un equipo multidisciplinario y la planificación meticulosa fueron clave para garantizar un resultado positivo en esta situación tan delicada.
La historia de estas gemelas es un testimonio de la valentía de los padres y la dedicación del personal médico, que trabajó incansablemente para ofrecerles un futuro saludable. La comunidad médica sigue de cerca la evolución de las bebés, con la esperanza de que pronto estén sanas y puedan reunirse con su familia.
