Cayó la cobradora de la banda del Millón: operaba desde la cárcel
La cobradora de la banda del Millón, identificada como Sofía Gómez, fue arrestada recientemente tras haber estado prófuga. A pesar de encontrarse tras las rejas, el líder de la banda, Brandon Brites, continuó dirigiendo las operaciones delictivas desde su celda en la Unidad 57 de Campana, dando instrucciones a través de mensajes de WhatsApp a su pareja sobre cómo recolectar dinero del botín obtenido por su organización criminal.
La policía bonaerense detuvo a Gómez, quien era considerada una pieza clave en el funcionamiento de la banda. Se le atribuye el rol de cobrar y trasladar parte del dinero robado, y su captura se produjo tras la emisión de una orden de arresto por parte de la jueza de Garantías de San Isidro, Andrea Rodríguez Mentasty.
Operaciones desde la cárcel
Durante su declaración, Gómez se negó a hablar ante el fiscal Patricio Ferrari, quien lidera la investigación que ha llevado a la captura de varios miembros de la banda. El grupo es conocido por sus robos violentos, uno de los cuales ocurrió en marzo en una vivienda en Acassuso, donde se llevaron aproximadamente 19.000 dólares, armas y otros objetos de valor.
La planificación del robo se realizó desde el penal, utilizando mapas satelitales y redes sociales para obtener información sobre la víctima, el exjuez federal Guillermo Rivarola, y su esposa. Después del asalto, tres adolescentes fueron arrestados en el barrio La Cava con parte del botín en su poder.
Desenlace de la investigación
Las autoridades han descubierto que la banda del Millón tiene una estructura operativa que sigue activa, incluso desde la cárcel. En un allanamiento a la celda de Brites, se encontró un celular que utilizaba para comunicarse con Gómez. Los mensajes entre ambos revelaron detalles sobre las operaciones y el dinero robado, lo que ha sido fundamental para avanzar en la investigación.
El fiscal Ferrari y su equipo están trabajando para identificar a otros posibles implicados en esta red delictiva, ya que la banda parece tener ramificaciones que se extienden más allá de los reclusos. La situación evidencia cómo las organizaciones criminales pueden continuar operando y coordinando actividades delictivas a pesar de la detención de sus miembros clave.
Este caso subraya la necesidad de intensificar los esfuerzos en la lucha contra el crimen organizado, y las autoridades continúan trabajando para desmantelar por completo la banda del Millón.
