Bonte 2030: Una Oportunidad para Inversores
El Bonte 2030 ha captado la atención de los mercados internacionales al ofrecer un bono en pesos con una tasa fija que vencera en 2030. Este instrumento, habilitado para inversores no residentes, busca evaluar el apetito del mercado y ha sido lanzado con un cupón del 29,5% TNA (TEA: 31,8%; TEM: 2,32%; MD: 2,5%). La decisión del Tesoro de priorizar la obtención de dólares en lugar de establecer una tasa más competitiva ha generado un interés significativo entre los inversores.

Resultados de la Licitación y Contexto Económico
La colocación del Bonte 2030 ha sido total, alcanzando los u$s1.000 millones previstos, después de recibir ofertas por u$s1.700 millones. Este éxito no solo proporciona divisas al BCRA, sino que también es crucial para cumplir con la meta del FMI prevista para el próximo 13 de junio.
Desafíos en el Mercado de Capitales
El actual mercado de capitales enfrenta dificultades para valorar instrumentos de esta naturaleza. Al inicio de la administración, la curva en pesos a tasa fija era casi inexistente, lo que complica las comparaciones. Sin embargo, hoy existen herramientas para evaluar el Bonte 2030, que incluye una opción de venta anticipada en mayo de 2027.
La Clave del Put en 2027
El Bonte 2030 incluye una opción de venta anticipada, lo que le da un plazo de duration de 1,4 años. Esto permite a los inversores evaluar el bono en relación a otros instrumentos en el mercado. A pesar de que el 90% del Boncap está en manos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), el Bonte 2030 ha superado a la Lecap a junio de 2026 en términos de rendimiento.
Potencial de Rendimiento del Bonte 2030
Si el proceso de desinflación continúa y el tipo de cambio se mantiene bajo control, el Bonte 2030 podría ofrecer un alto potencial de rendimiento. Los datos de inflación de alta frecuencia de mayo sugieren cifras cercanas al 2%, lo que proporciona margen en caso de volatilidad cambiaria. Para que este bono supere a otros como el CER o un bono en dólares, la inflación debería promediar menos del 19,8% anual.
Valuación y Comparación con Otros Bonos
La valuación del Bonte 2030 está influenciada por el tipo de cambio fijado en la licitación, que fue de $1.148, aunque ya cotizaba a $1.161 al día siguiente. Esto implica que el mercado está ajustando las expectativas en función de la inflación y la depreciación del peso.
Conclusión: Oportunidades y Desafíos
El Bonte 2030 presenta un claro potencial alcista gracias a la decisión del Gobierno de hacerlo atractivo para inversores. Aunque inicialmente podría cotizar con foco en la opción de venta anticipada, con el tiempo podría comenzar a negociarse como un bono a 2030, atrayendo así a más inversores extranjeros y convalidando tasas más bajas en futuras licitaciones.
Además, su éxito abriría la puerta a nuevas entradas de dólares mediante financiamiento en pesos, lo que es esencial para cubrir vencimientos en moneda dura. Sin embargo, el aumento del dólar mayorista, que ha subido 2,3% desde el tipo de cambio de suscripción, sugiere una presión alcista sobre el tipo de cambio oficial que debe ser monitoreada.