Aumenta la demanda de los préstamos personales: ¿vale la pena endeudarse para consumir?
El reciente auge en la demanda de préstamos personales en Argentina ha generado un debate sobre su conveniencia. Según el economista Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market, este boom está vinculado a la disminución de las tasas de interés. Durante el último año, los préstamos personales en pesos experimentaron un crecimiento interanual del 204%, aumentando el volumen total de $2,01 billones a $10,7 billones en un solo año, lo que refleja un notable repunte en el financiamiento al consumo.
La creciente demanda se debe a múltiples factores, como la necesidad de las personas de cubrir gastos cotidianos, la estabilidad del Índice de Precios al Consumidor y la disminución de las tasas de interés. Además, el crecimiento no se limita a los préstamos personales, ya que los créditos hipotecarios también han aumentado un 84,9% interanual, mientras que los préstamos prendarios avanzaron un 95,1%.

Riesgos y oportunidades en el sector de préstamos
El aumento en la concesión de préstamos no es un fenómeno aislado. Di Pace destaca que los bancos están viendo un nivel de rendimiento atractivo en los préstamos personales, lo que podría resultar en nuevos recortes en las tasas de interés. Sin embargo, este auge también conlleva riesgos, como el aumento de la mora en el pago de deudas. Al respecto, se debe tener en cuenta que la facilidad de acceso a créditos puede llevar a algunas personas a un sobreendeudamiento.
Además, las entidades financieras están adaptándose a la situación del mercado, ofreciendo una variedad de opciones que incluyen préstamos para la compra de bienes duraderos, como autos y electrodomésticos. Esta situación plantea la pregunta: ¿son los préstamos personales una solución sostenible o simplemente un alivio temporal para problemas financieros?
Consideraciones al solicitar un préstamo personal
Antes de decidirse a solicitar un préstamo personal, es fundamental tener en cuenta ciertas variables que pueden influir en la decisión:
- 1. Evaluar la necesidad real del préstamo: Determina si realmente es necesario endeudarse o si existen alternativas, como el uso de ahorros.
- 2. Comparar costos: No te guíes solo por la tasa nominal, analiza el costo financiero total que incluye seguros y comisiones.
- 3. Impacto de la inflación: Considera cómo la inflación puede afectar tu capacidad de pago y el tipo de tasa que elijas.
- 4. Capacidad de pago: Asegúrate de que el pago de la cuota no exceda el 30% de tus ingresos mensuales.
- 5. Alternativas a los bancos tradicionales: Explora opciones ofrecidas por fintechs que pueden tener menos requisitos.
- 6. Cláusulas y penalidades: Lee detenidamente los términos del contrato, especialmente sobre costos por pago anticipado.
- 7. Riesgo de sobreendeudamiento: Evalúa si el préstamo es una solución a largo plazo o un parche temporal.
Como señala Vanesa Di Trolio, Gerente de Desarrollo Digital en Reba, los préstamos personales son un recurso valioso en un contexto de alta inflación, ya que permiten acceder a liquidez inmediata para cubrir diversas necesidades. Sin embargo, es crucial abordarlos con prudencia y planificación.
En resumen, mientras que los préstamos personales pueden ofrecer soluciones inmediatas para financiar proyectos y gastos, es vital considerar los riesgos asociados y evaluar cuidadosamente la situación financiera antes de comprometerse. Mantente informado sobre las mejores prácticas y comparte esta información con quienes puedan beneficiarse de ella.