La controvertida ley fiscal promovida por la administración de Donald Trump, conocida como One Big Beautiful Bill (OBBB), ha comenzado a generar preocupaciones significativas en los mercados, especialmente entre los inversores internacionales. Un artículo específico dentro de esta ley ha suscitado alertas sobre el posible aumento de la presión fiscal sobre los inversores.
La Sección 899 del proyecto de ley ha sido objeto de críticas por parte del Investment Company Institute (ICI), una entidad que representa a las principales gestoras de fondos de inversión en Estados Unidos. En un comunicado, el ICI advirtió que la redacción actual de esta sección podría limitar la inversión extranjera en el país, un factor crucial para el crecimiento de los mercados de capital estadounidenses.
Preocupaciones sobre la Sección 899
El ICI destacó que, aunque es correcto que el Congreso busque proteger los intereses comerciales estadounidenses, la forma en que está redactada la Sección 899 podría desincentivar la inversión extranjera. Según su análisis, esto podría llevar a una salida masiva de capitales, debilitando las valoraciones bursátiles y afectando tanto a las empresas como a los accionistas locales.
El proyecto de ley está actualmente en manos del Senado, que se espera vote sobre él en julio. Ante esto, el ICI ha enviado una carta al senador Mike Crapo, presidente del Comité de Finanzas del Senado, para expresar su preocupación. La entidad advierte que la Sección 899 podría provocar ventas masivas de acciones por parte de inversores internacionales si se mantiene en su forma actual.
Implicaciones para la Inversión Extranjera
La Sección 899 tiene como objetivo aplicar un impuesto adicional del 5% sobre ciertas rentas pasivas de inversores extranjeros en Estados Unidos, con un aumento gradual que podría llegar al 20%. Este gravamen se sumaría a los impuestos existentes, lo que podría erosionar la rentabilidad de las inversiones en acciones estadounidenses para fondos y particulares de países como el Reino Unido, Canadá, Australia y miembros de la Unión Europea.
La situación es crítica, ya que el ICI representa más de 29.000 fondos que gestionan inversiones por más de 47 billones de dólares. Además, su influencia se extiende más allá de Estados Unidos, con oficinas en Londres y Bruselas, gestionando casi 9 billones de dólares en activos regulados fuera del país.
Reacciones del Mercado y Futuras Proyecciones
Los expertos consideran que la implementación de la Sección 899 podría llevar a una disminución en los activos bajo gestión y las comisiones que perciben las gestoras de fondos. Se estima que los inversores extranjeros controlan cerca de 19 billones de dólares en acciones estadounidenses, además de posiciones significativas en bonos y créditos corporativos.
El ICI ha expresado su apoyo a las iniciativas del gobierno para proteger sus intereses comerciales, pero ha advertido que la redacción actual de la ley podría tener efectos adversos en la economía estadounidense y en sus mercados financieros. Algunos países podrían aprovechar esta situación para atraer capital que abandone el mercado estadounidense.
En conclusión, la Sección 899 de la ley fiscal plantea un riesgo considerable para la inversión extranjera y la estabilidad de los mercados de capital en Estados Unidos. A medida que el Senado se prepara para debatir esta cuestión, el mercado estará atento a las decisiones que se tomen, que podrían tener repercusiones significativas en la economía global.
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