Marcos Carreras, el prodigio del violín argentino de 12 años
El chico empezó a tocar el violín a los 4 años y, desde el principio, mostró un talento increíble. Hablamos de Marcos Carreras, un joven de apenas 12 años que ya se ha presentado en escenarios de gran renombre, como el Teatro Colón. En un panorama musical donde predominan géneros como el trap y el reguetón, Marcos se destaca con su virtuosismo en un mundo más clásico y que a menudo pasa desapercibido.
Tal parece que la música corre por sus venas, ya que es hijo de dos violinistas. Desde pequeño, sus padres le inculcaron una gran pasión por la música, y no tardó en convertirse en una promesa en el ámbito musical. Marcos ha interpretado con varias orquestas destacadas en Buenos Aires, lo que confirma su creciente reputación entre los músicos.
Quién es Marcos Carreras, el violinista prodigio
“Me encanta esta carrera. Amo la música”, dice Marcos con una sonrisa que refleja su entusiasmo. A su corta edad, ya ha demostrado su capacidad para interpretar piezas complejas y emocionar al público. Nació en 2013 y aprendió a tocar el violín antes incluso de saber leer y escribir. ¡Increíble, ¿no?! Su talento natural lo ha llevado a tocar en algunos de los escenarios más prestigiosos, como el mencionado Teatro Colón.
A Marcos no le asusta la idea de tocar frente a multitudes. “Cuanta más gente me mire en un concierto, mejor. No me pone nervioso. Al contrario, me motiva”, comenta. Es admirable cómo se siente estimulado al tener a su público presente. Antes de cada actuación, se dedica a pensar en cómo va a cautivar a quienes lo escuchan.
El chico comenzó su camino en la música muy joven y rápidamente se notó su habilidad. Se ha formado con grandes maestros y, además de su debut en el Teatro Colón a los 11 años, ha tenido el privilegio de tocar con orquestas como la Orquesta Aeropuertos Argentina y la Orquesta Sinfónica Municipal de San Martín durante eventos importantes de la capital.
Recientemente, participó en “La Noche de los Museos” y tuvo la oportunidad de rendir homenaje a Rafael Gíntoli, un violinista y pedagogo muy reconocido. Su agenda sigue expandiéndose, con presentaciones en lugares icónicos como la Usina del Arte y el Centro Cultural San Martín.
En cuanto al apoyo a su carrera, Marcos continúa perfeccionándose a través de una beca de la Fundación Corporación América. Además, el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires lo ha incluido en el programa de “Artista de Alta Dedicación”. Su futuro brillará aún más, sin duda.