Precios de vacaciones en Brasil y la Costa Atlántica
El verano de 2026 se asoma con una tendencia clara entre los argentinos: muchos optan por viajar a Brasil en lugar de disfrutar de la Costa Atlántica. Con el real en baja y precios más accesibles en restaurantes y servicios, cada vez son más los que eligen cruzar la frontera para sus vacaciones, como ocurrió el año pasado.
Este año, las principales agencias de turismo están notando un aumento en la demanda por destinos brasileños. Lugares como Florianópolis, Río de Janeiro, Natal y Maragogi son los más populares entre quienes planean escapar del calor. Si bien el costo de los vuelos puede ser alto, el abaratamiento del real frente al peso y las promociones en pasajes están haciendo que una vez allí, los gastos diarios sean considerablemente más bajos que en nuestra costa.
¿Cuánto cuesta realmente disfrutar en Brasil?
En Brasil, la variedad de alojamientos es impresionante y a precios atractivos. Muchos incluyen desayuno y servicios que hacen la estadía más cómoda. Comer fuera o alquilar sombrillas y reposeras sale, en general, menos de lo que se gasta en Argentina. Por ejemplo, alquilar una sombrilla puede costar unos $7.000 por día. La infraestructura turística también es de buena calidad, lo que hace de Brasil un destino atractivo, especialmente para familias y grupos de jóvenes.
En cambio, la Costa Atlántica llega a este verano con precios más altos. Cada balneario tiene sus tarifas, pero en Mar del Plata, por ejemplo, alquilar una carpa puede costar $735.000 por semana, mientras que en Villa Gesell se puede conseguir a mitad de precio. En Pinamar, las carpas rondan los $450.000 por semana y $700.000 por quince días.
Cuando hablamos de alojamiento, los precios dependen de la ciudad y de la distancia a la playa. Un departamento de dos ambientes en el centro de Mar del Plata para 3 o 4 personas puede costar entre $60.000 y $70.000 por día, y hasta $80.000 si tiene cochera. Para familias más grandes, la cosa se complica: dos dormitorios y cochera podrían costar entre $100.000 y $120.000 diarios. Mientras que en Río de Janeiro, los precios de los departamentos oscilan entre u$s55 y u$s150 diarios, dependiendo del tipo de inmueble.
El tipo de cambio también juega un papel muy importante. La depreciación del real frente al peso permite a los argentinos disfrutar de un mayor poder adquisitivo en Brasil. Y con promociones en vuelos y paquetes turísticos, el costo de entrada se vuelve más accesible. Algunas ofertas de vuelo y hotel para seis o siete noches se acercan a lo que se pagaría por un alquiler promedio en la Costa Atlántica durante la temporada alta.
Por ejemplo, hay paquetes que incluyen vuelo, hotel y traslados; uno a Salvador de Bahía se puede conseguir por u$s1.234. Otro a Natal por u$s1.349 y a Arraial do Cabo por u$s657.
Más conexiones y vuelos directos
Este verano, la conectividad también es una gran novedad. Brasil ha lanzado un programa para aumentar sus rutas internacionales, lo que se traduce en nuevos vuelos directos desde ciudades argentinas como Rosario, Córdoba, Mendoza y Salta.
Aerolíneas Argentinas planea añadir rutas como Rosario–Búzios–Cabo Frío y Salta–Florianópolis. Flybondi también se está sumando con nuevas frecuencias hacia Río de Janeiro y Florianópolis, además de ofrecer más conexiones a Salvador de Bahía. Gol ha anunciado un vuelo directo de Mendoza a Río de Janeiro para el próximo verano.
Aunque los precios son un tema de discusión, el último fin de semana largo de noviembre mostró que la Costa Atlántica todavía espera mucho público. Su cercanía y variedad de opciones hacen que siga siendo una opción popular para muchos.