Automotrices colaboran para prevenir multas millonarias
La Unión Europea se mantiene firme en su objetivo de eliminar los vehículos a combustión para el año 2035. Sin embargo, el camino hacia esta transición empieza a mostrar algunos baches. La presión de los fabricantes y de varios gobiernos ha llevado a Bruselas a reconsiderar cronogramas y a flexibilizar exigencias de emisiones. Todo esto ocurre porque la industria automotriz enfrenta importantes dificultades para adaptarse a los ritmos establecidos.
El Parlamento Europeo había determinado que, a partir del 1° de enero de 2035, solo se deberían poder vender autos eléctricos en el continente. Pero, dado el alto costo de los coches y la infraestructura de carga, la Comisión Europea decidió dar un respiro, extendiendo el plazo hasta 2027 para que las marcas alcancen los objetivos de emisiones previstos para 2025.
Eliminación de los autos a combustión: alineación para evitar multas millonarias
El superávit por encima del límite de 93,6 g/km se penaliza con 95 euros por cada gramo adicional. Esto podría significar hasta 15.000 millones de euros en sanciones para la industria automotriz en su conjunto, lo cual es un golpe fuerte para cualquier empresa.
Para eludir estas penalizaciones, muchas automotrices han encontrado un truco: comprar créditos de emisiones a otras compañías que tienen mejores registros ambientales. Por ejemplo, Tesla tiene un importante excedente y se ha convertido en un proveedor clave para marcas como Stellantis, Toyota, Ford, Mazda y Subaru. Se han formado alianzas inesperadas, como la de Nissan con BYD, o Mercedes con Volvo, todo buscando un equilibrio tanto ambiental como financiero.
Mientras tanto, los autos eléctricos ya representan el 12% de las ventas en Europa, y los pronósticos indican que podrían alcanzar el 40% hacia 2030. Esto sucede en un mercado cada vez más competido por fabricantes chinos y con un aumento de costos de producción.
Es un momento interesante para la industria automotriz y los consumidores, que empiezan a sentir el impulso hacia una movilidad más sustentable.