Karina Milei, Luis Caputo y Mario Lugones no irán a Diputados
Desde el Congreso, se confirmó que el ministro de Economía, Luis Caputo, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el ministro de Salud, Mario Lugones, enviaron notificaciones anticipando que no podrán asistir a las sesiones programadas. Este tipo de ausencias no es nuevo, ya que Caputo ha faltado en otras ocasiones, incluso en debates importantes como el del Presupuesto 2025.
Las sesione estaban convocadas para abordar varios temas, incluyendo pedidos de informes y explicaciones relacionadas con la gestión económica y la Agencia Nacional de Discapacidad. Ante la falta de los funcionarios, algunas fuentes parlamentarias sugieren que las reuniones podrían posponerse, ya que no tendría mucho sentido continuar sin su presencia.
La notificación de ausencia fue formalizada con documentación que se ingresó esta mañana al cuerpo legislativo, lo que ha generado incertidumbre sobre si las sesiones programadas se llevarán a cabo.
Interpelación a Francos avanza, pero la opción de destituirlo pierde fuerza
Mientras tanto, en la Cámara de Diputados se logró avanzar hacia la interpelación del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, debido a su decisión de no aplicar la Ley de Emergencia en Discapacidad. Este proyecto tiene el apoyo de bloques como Unión por la Patria y Encuentro Federal.
En total, la propuesta de interpelación reunió 29 firmas como dictamen de mayoría. Se solicita que Francos asista al recinto para ofrecer explicaciones, y, si sus respuestas no satisfacen, podría abrirse el camino para una moción de censura. Sin embargo, no todos los bloques respaldan esta última opción. Algunos prefieren limitarse a la interpelación, argumentando que la censura podría usarse con fines políticos.
La implementación de la Ley de Emergencia en Discapacidad fue suspendida por un decreto que argumentaba la falta de un mecanismo de financiamiento, lo que ha generado reclamos entre los legisladores que apoyan la interpelación. Ellos consideran que esta suspensión es una falta de respeto a una norma que ya fue aprobada por el Congreso.
Aunque ya está listo el dictamen para la interpelación, la posibilidad de una moción de censura se siente debilitada. Se requiere una mayoría absoluta para concretarla, y no todos los bloques están de acuerdo en avanzar en ese sentido.